El Real Zaragoza quiere fortificar su plantilla para poder seguir escalando posiciones en la tabla de la Liga Hypermotion y, por qué no, conseguir subir a la máxima categoría el año que viene. Para ello, están muy interesados en hacerse con Joao Basso. Se trata de un defensa brasileño que pertenece al Santos. Es un central de 27 años, con la experiencia necesaria que buscan los ´leones´ para ser capaces de dar un paso al frente en la categoría de plata española.
Entre las mayores virtudes de Basso se encuentra el juego aéreo, a través del cuál es una gran ayuda a la hora de convertir en goles, gracias a su 1,87 de altura y la precisión para rematar. De igual forma, es un central agresivo en la disputa y en el cuerpo a cuerpo, además de tener muy buen pie para la salida de balón. Justo las cualidades necesarias que Víctor Fernández, el entrenador del equipo de la Romareda, busca. Además, Joao Basso ya lleva tiempo en el punto de mira del director deportivo del Zaragoza, Juan Carlos Cordero. Muestra interés en él desde su etapa en el Arouca, pero había sido una opción imposible de llevar a cabo en otros mercados de fichaje.
El futbolista ha estado cedido en el Estoril estas últimas temporadas, equipo para el que ya había jugado durante dos temporadas, ya que en el Santos ahora mismo no cuentan con él. En su carrera deportiva ha defendido la camiseta de otros clubes como el Paraná Clube, el Real Massamá y el Arouca.
Esta zona del terreno de juego es una de las que el conjunto aragonés necesita cubrir con más solvencia. Este verano se van a producir muchas salidas en esas posiciones. Por ello, el equipo de Víctor Fernández va a experimentar serias remodelaciones de cara al inicio del próximo curso. Las posibles marchas de Alejandro Francés, al que el club quiere blindar por ser una de sus piezas clave y un objetivo muy codiciado por varios clubes de España, y Jair, al que le van a dar salida, dejan la defensa en una situación muy débil. Además, Mouriño regresa al Atlético tras la cesión.
El principal foco del Zaragoza estaría puesto en una cesión, ya que el defensa tiene un contrato en vigor por dos años más, hasta junio de 2026, con el Santos, y su ficha está establecida en 480.000 euros netos, un gasto que los blanquillos prefieren no hacer. Sin embargo, no va a ser un acuerdo sencillo. Hay otros clubes que se suman a la carrera por el defensa, como el Eibar y varios equipos brasileños.