Fernando Mateos4 min lecturaLa cantera del Real Zaragoza disfruta de un buen momento, con exponentes en el primer equipo como Iván Azón y Alejandro Francés, que sigue siendo un fijo para Santi Denia en la selección española sub 21. Pero existe un problema histórico que sigue dando quebraderos de cabeza en La Romareda: la fuga de talentos a otros clubes más poderosos tanto deportiva como económicamente.
Ese riesgo latente amenaza de nuevo al conjunto maño con su nueva joya: Gorka Buil. Nacido en 2010, el mediapunta zurdo ya estuvo en el punto de mira del Barcelona el año pasado, si bien en ese momento fueron los padres de la joven promesa quienes se negaron a un cambio de aires. Pero el futbolista salido del Amistad no para de crecer y de llamar la atención en todo el fútbol español.
Aún en edad infantil, aunque milita en el División de Honor Cadete, ya firmó hace dos temporadas un contrato de larga duración, con cláusula de rescisión incluida, gracias al cual percibe una asignación económica pese a su corta edad. Y es que, sobre el campo, Gorka Buil demuestra tener muchas papeletas para llegar a la elite, destacando por su llegada y último pase.
Su última exhibición llegó en el Campeonato de España de selecciones autonómicas, logrando el pase de Aragón sub-14 a la Fase Oro al derrotar a Extremadura y Madrid, con dos asistencias en el primer partido y dos tantos en el segundo, uno de ellos de córner directo.
En dicho torneo estuvieron presentes ojeadores de clubes de Primera división como Getafe, Granada, Valencia, Villarreal, Betis, Sevilla, además de Real Madrid y Barcelona, que son los dos grandes interesados, según informa Heraldo de Aragón.
El citado medio aclara además que el blindaje que el Zaragoza tejió en su día para evitar la marcha de su gran promesa es, en realidad, fácilmente recurrible en una batalla judicial. Por ello, se entiende que, llegado el caso, al club maño no le quedaría otra que ponerse de acuerdo con el equipo que convenza al jugador, si bien de momento tiene a sus padres como aliados.
De momento, la cifra que le cierra la puerta de salida sólo es una cantidad disuasoria por un futbolista que aún no ha cumplido los 14 años. Pero en el recuerdo de todos en La Romareda está el caso de Álvaro Sanz, cedido actualmente en el Mirandés, al que el Barcelona firmó en su día con un contrato por objetivos que podía llegar hasta los dos millones de euros en concepto de traspaso, siempre que diera el salto al primer equipo.
Sea como fuere, todos están pendientes de Gorka Buil. Y no sólo los clubes, también los agentes. Desde hace meses, tiene un contrato con la agencia Bahía y se apunta que incluso el poderoso Jorge Mendes lo tiene en el punto de mira para llevar sus asuntos en un futuro.