El Athletic Club regresa a LaLiga este fin de semana después de proclamarse campeón de la Copa del Rey. Ha sido una semana bastante movida en Bilbao, ya que los jugadores bilbaínos han aprovechado cada día para celebrar por las calles de la ciudad vasca su triunfo. Aun así, en esta jornada volverán a seguir peleando por su plaza de Champions League. En frente estará un Villarreal que también quiere pelear por sus opciones europeas lo que queda de temporada. El foco sin embargo, parece esta vez puesto sobre el palco de San Mamés.
Las relaciones entre Villarreal y Athletic Club parecen un tanto desquebrajadas. El fichaje de Igor Oyono por el conjunto rojiblanco, una de las perlas de la cantera del submarino amarillo, hizo saltar por los aires su estrecha relación. Por ello, según informa el diario As, la directiva del conjunto groguet no acudirá al palco de San Mamés este fin de semana, no tendrá ninguna representación institucional. Aun así, los amarillos sí que mantendrán el pasillo al campeón antes del partido.
El fichaje de Igor Oyono no sentó del todo bien a la directiva groguet, sobre todo al firmar al jugador antes de que cumpliera los 16 años, antes de que tuviera un contrato algo más formar en el Villarreal. “Es un jugador que tiene contrato y ya veremos lo que pasa los próximos días”, decía Fernando Roig Negueroles el pasado mes de enero. El club castellonense se plantea incluso estudiar el caso para llevarlo a los tribunales.
No es el único motivo. Hace algunos años, Fernando Roig también cargó contra los leones por el fichaje de Nico Serrano, que hoy se encuentra cedido en el Racing de Ferrol y sigue perteneciendo al Athletic Club.
“Tenemos la mejor cantera de España, por eso vienen todos los equipos a robarnos jugadores. Aquí lo denuncio. Me parece fatal que los grandes equipos vengan a robarnos jugadores de 15 años con contratos antes de llegar a profesional, eso que conste y que se quede ahí. Barcelona, Atlético de Madrid y Athletic de Bilbao, uno cada uno”, decía Fernando Roig en unas declaraciones.
Fuera de lo que ocurra en las gradas, será un partido especial, sobre todo por la vuelta de Marcelino a la que fuera su casa. El técnico asturiano ya fue de los primeros en felicitar al Athletic por la consecución de la Copa del Rey del pasado sábado. La afición le guarda cariño y muchos aún no comparten su marcha, obligada por unas elecciones presidenciales que dieron pie al crecimiento del club. Habrá que ver lo que suceda con el resto de los equipos, pero una victoria de los rojiblancos podría hacer que superen de nuevo al Atlético de Madrid en la tabla y ocupar los puestos de Champions. Mientras tanto, una victoria del submarino amarillo les dejaría a tres puntos de los puestos europeos.