Quique Setién fue uno de los técnicos que participó en la reunión a tres -entrenadores, árbitros y RFEF- que se llevó a cabo este pasado martes en la capital de España. Una denuncia del cántabro ha puesto en pie de guerra a los entrenadores del fútbol español como consecuencia de los impagos que sufren cuando son despedidos.
La solicituad del cántabro es sencilla, que los técnicos cobre sus finiquitos con la mayor rapidez posible una vez que son despedidos. Al respecto se ha referido ahora el propio Setién en la cadena SER, donde ha puesto de manifiesto que el Barcelona, club que lo despidió antes de firmar por el Villarreal, club del que también ha acabado saliendo este curso, le acabará de pagar su finiquito tres años después de haberse hecho cargo del banquillo culé: "En principio no iba a ir a esta reunión. Al final no te queda otro remedio que ir a la Justicia. Cinco días antes del juicio pude arreglar un acuerdo del Barcelona. 16 meses después llegamos a un acuerdo, pero me dijeron que les perdonase dinero y no estaba dispuesto. Están cumpliendo los pagos a rajatabla, pero me terminarán de pagar tres años después de haber entrenado al Barça".
Un problema que sufren todos los técnicos, como el propio Setién reitera: "Para muchos ha sido una sorpresa absoluta que no sé cuántos entrenadores han expuesto sus casos particulares, tal vez entre 10 ó 12 ó 14 entrenadores de Primera y Segunda División. El que no ha resuelto el problema lo ha tenido que arreglar condicionado por la lentitud de la justicia".
No fue el FC Barcelona, sin embargo, el único club que salió mal parado en las declaraciones de Setién, sino que también repartió estopa para el Villarreal y sus formas. La filtración de los supuestos motivos por los que había sido despedido no le ha sentado nada bien al entrenador cántabro: "Ya no me gustó mucho la llamada del director general del club avisándome de lo que iba a pasar. Eso ya me pareció lamentable, pero tristemente ya tengo experiencia con estas cosas... Ya desde que Jesús Gil dijo en su momento que yo venía a Santander a atender un negocio de bebidas cuando jugaba o que iba con mujeres de manera estentórea, desde aquella época los pliegos de cargo que he recibido en algunos casos eran de chiste. Estos tratan de no pagarte y desprestigiarte y tratar de hacerte daño. Son prácticas en las que ellos se ponen en evidencia ellos mismos, y no tengo nada más que decir. Al Villarreal como club le tengo mucho respeto, como a todos los clubes, otra cosa son las personas que los puedan dirigir en cada momento".
Con respecto al Villarreal, asegura Setién, también, que no le sorprendió que Pacheta fuera destituido, pues "siempre ha estado el nombre de Marcelino". Igual de claro tiene el volverse a sentar en un banquillo, pues entiende que pocos clubes querrán contar con él desde ahora: "Ahora estamos dedicándonos al ajedrez. No sé si hay muchos equipos que quieran ficharme con lo que ha pasado hoy".