Alejandro Sáez3 min lecturaEl Villarreal aguantará a Pacheta una semana más en su banquillo. Esa es la conclusión que ha sacado en las últimas horas la planta noble del conjunto castellonense, que ya le ha marcado el punto final a su actual entrenador: Si los resultados no acompañan, tan sólo se sentará este jueves frente al Maccabi Haifa y el domingo en el Metropolitano, ante el Atlético Madrid, aprovechando el parón liguero por las selecciones para acometer la contratación de su recambio.
De confirmarse la hoja de ruta, el sustituto no será otro que un Marcelino con el que ya se negocia. De parón a parón, eso es lo que durará la etapa de Pacheta al frente del Submarino amarillo si no consigue sacar la reválida que se le plantea en esta semana. Dos meses, desde que sustituyera a Setién y se sentara por última vez ante el Atlético; un punto final ya establecido que tan sólo está en la mano del propio Pacheta el convertirlo en punto y seguido.
De hecho, todo quedará en manos de Marcelino, técnico fetiche de la familia Roig y principal y casi único candidato a suplir a Pacheta. Las negociaciones con el propio Marcelino, por respeto, aún no se han iniciado, aunque hace tiempo que se viene hablando con su entorno y está todo prácticamente encarrilado, tal y como puntualiza Relevo.
Según el citado medio, la conversaciones con el entorno del técnico asturiano comenzaron días atrás, habiéndose hablado ya de contratos, salarios y decisiones a tomar. No hay nada cerrado, lógicamente, pues Pacheta, incluso, podría salvar el ‘match ball’ que le han presentado ante el próximo parón liguero. En cualquier caso, bien sea ahora o ya mirando al próximo verano, en La Cerámica tienen claro que quieren que sea Marcelino el próximo técnico del banquillo amarillo.
De acabar haciéndose con el banquillo ahora, antes de que finalice la temporada, Marcelino llegaría por lo que resta de éste más el próximo curso, amén de una tercera temporada opcional. Unos detalles aún por pulir.
Los métodos del entrenador burgalés no han acabado de convencer a la plantilla del Villarreal, con un balance muy pobre: once partidos al frente (ocho de LaLiga, uno de Copa y dos de Conference League) con cuatro victorias, tres empates y cuatro derrotas. Europa está demasiado lejos, siendo esa la tarea que se le encomendaría a Marcelino.
La plantilla, mientras tanto, parece seguir al lado de Pacheta. Al menos así lo demuestran públicamente, como es el caso de Morales y Denis Suárez, quienes han sido cuestionados por las cámaras de El Chiringuito. El gallego, al menos, no le pone demasiado énfasis a su afirmación: “Es el entrenador que tenemos”.