¿Maletas preparadas en el Villarreal?

Tras el desastre sufrido en Copa del Rey ante Unionistas, son muchos los que se preguntan si el club castellonense debería seguir confiando en él hasta el final de la presente temporada

Alberto GálvezAlberto Gálvez
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¿Maletas preparadas en el Villarreal?
Marcelino, durante un encuentro con el Villarreal. - Cordon Press

¿Qué hubiese pasado si Quique Setién o Pacheta caen ante Unionistas en la Copa del Rey? Hubiesen sido fulminados a las primeras de cambios. ¿Por qué Marcelino sigue contando con el respaldo de la directiva castellonense pese a que apenas ha mejorado a los anteriores entrenadores? Por su pasado glorioso en el club.

Estas son algunas de las preguntas y respuestas que se hacen ahora los aficionados del Villarreal tras ver cómo un equipo de Primera RFEF les ha eliminado en los dieciseisavos de final del torneo del KO. Y es que la imagen que está ofreciendo el 'Submarino Amarillo' desde la llegada del técnico asturiano a su banquillo hace ya casi dos meses dista mucha de la que soñaban dirigentes y seguidores villarrealistas.

Porque si sólo fuesen los resultados los que le están dando la espalda, otro gallo cantaría. Pero lo cierto es que, a día de hoy, el cuadro levantino juega a lo mismo que con Setién o Pacheta. A nada. Y, por si fuera poco, Marcelino tiene menos paciencia que estos anteriores por tener un currículum algo más laureado que estos.

Lo que no sabe Marcelino es que el fútbol ha cambiado mucho desde que hace casi una década triunfara en La Cerámica. Y que las segundas vueltas casi nunca fueron buenas. Y si no mejora la cosa en las próximas citas ligueras, podría ser el tercer técnico que abandona el banquillo amarillo esta temporada. Todo un récord.

Sus cifras desde su llegada lo dicen casi todo. Cinco triunfos (Zamora, Osasuna, Pananthinaikos, Rennes y Celta) en once partidos. En todos ellos sufrió y, excepto ante Osasuna, acabó pidiendo la hora. El resto han sido tres empates (Sevilla, Maccabi Haifa y Unionistas) y tres derrotas (Real Sociedad, Real Madrid y Valencia).

Si por números fuese, quizás se merecería más créditos, pero la imagen ofrecida desde que cayeran 0-3 contra la Real en casa está generando muchas dudas entre la hinchada castellonense. Por el Santiago Bernabéu (4-1) y por Mestalla (3-1) prácticamente ni se presentaron. Y para colmo, Unionistas le apea de la Copa del Rey habiendo tenido hasta tiempo para hacer un planteamiento distinto respecto al día en el que se suspendió el partido.

Pero lo que más debe preocupar en el seno de la entidad es que no termina de conectar con el vestuario y en periodos como el que está atravesando su carácter podría complicar la situación aún más. Ante el Valencia le sentaron muy mal la autocrítica que hizo Gerard Moreno y le mandó un mensaje a él y a todo el vestuario: "Hemos tenido 19 jornadas para hablar y ahora tenemos 19 para actuar".

Cuando hoy se han despedido en Salamanca de la Copa, el torneo en el que se estrenó este curso ante el Zamora y en el cual aspiraba a enmendar la temporada, el de Gijón ha tirado de excusas: "Ha sido extraño. Es la primera vez que me sucede algo así. Cualquiera que analice y que haga una reflexión ve que cuando sucede una prórroga el mayor favorecido es el equipo de Primera División. Por ello, ¿qué beneficio sacábamos de jugar hoy? Teníamos que quedarnos un día más y no teníamos casi cambios para hacer hoy. Quien dijo eso de que no queríamos jugar quería difamar. Ahora se hace caso a cualquier cosa sin reparar en que la noticia sea contrastada. Pues venga, lo pongo en las redes y ya está. Nosotros queríamos todo lo contrario. Hoy había muchas posibilidades de que se llegara a los penaltis porque se ha jugado muy poco. Ahora debemos felicitar a Unionistas por la clasificación y centrarnos en LALIGA, que tenemos mucho trabajo por delante”.

Y tal y como hiciera en Mestalla, donde lanzó mensajes contrapuestos (dijo que tenían que actuar y al mismo tiempo que su equipo había hecho méritos para puntuar), hoy con su discurso no ha convencido a nadie. Ha hablado de futuro y ha querido hacer ver que este varapalo les beneficiará en LaLiga: "Debemos pensar ya en nuestros próximos objetivos y saber que la ausencia de la Copa nos permitirá entrenar más para asentar unas bases más sólidas".

Perdóneme Marcelino, pero estos argumentos no se los compro ni al mejor comercial del mundo. El crédito se le está agotando y, por si sigue sin saberlo, se lo repito. El fútbol ya ha cambiado. Ahora no mandan los entrenadores, mandan los jugadores. Esa es la primera asignatura que debe aprobar este año. Gánese el cariño de ellos primero y todo le irá mejor.