Getafe
Villarreal
Álex Baena vivió una jornada complicada este sábado durante el enfrentamiento de su equipo contra el Getafe. En el minuto 22 del partido, Baena fue sancionado con una tarjeta roja tras propinar un claro codazo a Mitrovic. La intervención del VAR fue crucial, ya que llamó la atención del árbitro para que revisara detenidamente la acción en cuestión.
Como resultado de la visualización de la jugada en el monitor por parte del árbitro, Baena se vio obligado a abandonar el terreno de juego al ser expulsado, dejando a su equipo con un jugador menos. Esta expulsión marcó la tercera para el Villarreal en lo que va de la temporada, una situación que sin duda preocupó al entrenador 'Pacheta'. Aunque el técnico mostró su enojo en ese momento, su reacción estaba más relacionada con la impotencia que con otra cosa, ya que la tarjeta roja parecía una decisión justificada ante la evidente infracción cometida por Baena.
Antes de este incidente, Álex Baena ya había acumulado tres tarjetas amarillas en lo que iba de LaLiga, lo que indicaba cierta tendencia a la indisciplina en el campo. En la temporada anterior, el jugador español había visto la tarjeta amarilla en 12 ocasiones durante los partidos de liga, además de haber recibido una tarjeta roja. Resulta interesante destacar que Baena fue uno de los protagonistas de una de las polémicas más destacadas de la temporada pasada, cuando tuvo un altercado con el jugador Fede Valverde.
Es importante mencionar que, el pasado mes de julio, la denuncia presentada por Alejandro Baena contra Fede Valverde fue finalmente archivada debido a las incongruencias presentes en su declaración. El Juzgado de Instrucción Número 48 de Madrid no pudo encontrar pruebas suficientes que respaldaran las afirmaciones del jugador español, lo que resultó en la desestimación de su denuncia.
Este reciente incidente en el partido contra el Getafe seguramente provocará diversas conversaciones y debates en el mundo del fútbol. Pone de relieve la importancia de mantener la disciplina en el campo y respetar las reglas del juego. Aunque Baena es un jugador talentoso, debe aprender a controlar sus impulsos y evitar acciones que puedan perjudicar a su equipo. La tarjeta roja mostrada en este partido es un recordatorio de cómo las decisiones impulsivas pueden tener un impacto significativo en el rendimiento de un equipo y su posición en el campeonato.
La de Baena es la tercera expulsión de los amarillos en ocho partidos de liga, dos han sido roja directa y otra por doble amarilla, mientras que ha sumado hasta 18 cartulinas amarillas en las primeras sietes jornadas, es decir, sin contar el duelo ante el Getafe.
'Pacheta' no escondió su enfado en la banda del Coliseum Alfonso Pérez, puesto que la expulsión de Baena era totalmente evitable, al igual que le ocurrió a Pedraza contra el Cádiz en la jornada 4 y que le supuso dos partidos de sanción.