Alberto Gálvez3 min lecturaMuchas veces no se le da la suficiente importancia a la figura del segundo entrenador cuando se elige al primero y son muchos los casos en los que se ha demostrado el papel crucial que pueden llegar a desempeñar en el resultado final de un equipo. Le ocurrió a Guardiola con el fallecido Tito Vilanova, encargado, entre otras facetas, de las estrategias a balón parado del conjunto azulgrana.
Y es que la función del 'poli bueno' no todo el mundo sabe ejecutarla bien en un vestuario. Y menos en la elite. Mostrarse más cercano a los jugadores que el primer entrenador y a la vez ejercer de comunicador inmediato con éste, que no de 'chivato', en cuanto suene la más mínima alarma entre ellos no es tarea fácil. Sobre todo, si a ello hay que sumarle horas de análisis, preparación de entrenamientos y consejos de urgencias en pleno partido.
Pues bien, lo que era un secreto a voces, el Valencia lo acaba de comunicar oficialmente. Rubén Baraja renueva como entrenador che y lo hace para las dos próximas temporadas, hasta junio de 2025. Sin embargo, el técnico vallisoletano deberá buscarse un segundo entrenador que reemplace a su amigo íntimo Carlos Marchena, quien ya le ha comunicado al club que no puede seguir "por motivos personales".
Después de varios días de negociación entre el director deportivo del club, Miguel Ángel Corona, y el agente del técnico, Manuel García Quilón, ambas partes han decidido prolongar una aventura que, al menos, esta temporada ha tenido final feliz.
Cabe recordar que, tras la salida de Gattuso, Baraja tomó las riendas de un equipo que no ha logrado su permanencia en LaLiga Santander hasta la última jornada. Eso sí, entre sus decisiones más destacadas está la valentía con la que afrontó el reto contando con muchos jugadores jóvenes de la cantera valencianista. Algunos incluso se han consagrado ya en Primera, como Javi Guerra, Diego López o Alberto Marí.
En los 17 partidos que ha dirigido al Valencia sumó 22 puntos (6 victorias y cuatro empates) que le permitieron acabar en la 16ª plaza en la última cita del campeonato.
Ahora, tras confirmarse la marcha de Carlos Marchena como técnico ayudante - algunas voces le señalan como sustituto de Monchi en el Sevilla - la primera tarea que tiene que afrontar Baraja es la de conformar un nuevo cuerpo técnico que le permita tomar las mejores decisiones para el futuro del equipo. Así, deberá reunirse entre otros con el técnico Toni Seligrat -que había sido reclutado por Voro tres semanas atrás- y con el preparador físico Juan Monar para confirmar si siguen o no.