Javi Guerra se erige, sin duda, en una de las grandes revelaciones de esta temporada. Su irrupción a las órdenes de Baraja ha resultado fundamental para el Valencia al consolidarse como pieza clave en el centro del campo che.
El canterano se estrenó en el primer equipo el curso pasado, el 16 de abril de 2023 ante el Sevilla, y participó hasta el final en un total de diez en encuentros en los que ya avisó de la importancia que adquiriría en los planes del míster en el siguiente curso.
Así, desde principio de campaña ha sido indiscutible para Baraja y ha contribuido considerablemente a que el Valencia ocupe la novena plaza, con once puntos por encima del descenso y solo a cuatro de puestos europeos. No en vano, el medio ha marcado tres goles y servido una asistencia en los 13 encuentros jugados en LaLiga y, sin duda, se trata de una de las nuevas sensaciones del campeonato español.
Obviamente, este rendimiento espectacular, premiado por la internacionalidad en la sub 21, ha situado en el escaparate a Javi Guerra, que, a sus 20 años, ya se encuentra en la agenda de grandes clubes europeos, que incluso ya se han interesado por su situación de cara a los próximos mercados.
Entre ellos, ha surgido ahora con fuerza la Juventus italiana, que ha subrayado su nombre y ha tanteado el terreno con la mente puesta en enero ante su necesidad en la medular por las sanciones de Paul Pogba y Nicolò Fagioli. Su director deportivo, Giovanni Manna, ha centrado su atención en Guerra y, según apunta Sport, habría estado recientemente en Valencia y vuelto a Turín con magníficos informes del jugador y también con una idea de lo que costaría la operación.
El Valencia, en cuanto el medio empezó a despuntar en el primer equipo la temporada pasada, se apresuró a blindarlo con una renovación hasta 2027 y una cláusula de 100 millones de euros, a la que, lógicamente, se remite en primera instancia.
La Juve no pagará en ningún caso esta cantidad, pero es consciente de la precaria situación económica del Valencia y tendría previsto poner sobre la mesa de Peter Lim alrededor de 40 millones de euros para hacerse con los servicios de Javi Guerra, al que, obviamente, le multiplicaría la ficha que percibe en Mestalla. Esta situación preocupa a Baraja y a la dirección deportiva, que, de momento, no quieren deshacerse de su gran joya.