La lógica diría que el Valencia CF y Rubén Baraja están condenados a entenderse para seguir juntos tras la salvación del equipo, pero en la entidad del Turia hace años que nada responde a unos parámetros definidos.
En la directiva de la escuadra valencia están realmente contentos con el trabajo del técnico vallisoletano, ya que ha logrado evitar el descenso a LaLiga Smartbank y de paso ha abierto las puertas a chicos jóvenes del filial que han dado un fantástico rendimiento. Entonces... ¿qué hace dudar a Baraja? El miedo a que se repita la historia.
El Valencia lleva demasiados años en una espiral de autodestrucción de la que no logra salir. Poco a poco ha ido perdiendo potencial deportivo y ello se ha terminado traduciendo en una temporada 2022-23 en la que directamente ha vivido al filo de la navaja. Para Baraja, un ídolo para la parroquia de Mestalla, dar forma a un proyecto con unas bases sólidas sería un sueño hecho realidad, pero es que no se fía.
Lo que desea el técnico de 47 años no es nada sencillo. Básicamente quiere hechos por encima de las palabras, y eso es imposible de medir a estas alturas de la película. Por ello, Baraja acude a la reunión que tendrá hoy miércoles 7 de junio con algunos directivos del club con el deseo de explorar la posibilidad de firmar un nuevo contrato, pero no con pocas dudas.
En principio se espera que en la cumbre esté Miguel Ángel Corona, director técnico del club, y puede que con algún directivo más, pero no así la presidenta Layhoon Chan, quien este martes voló a Singapur después de haber participado en el diseño del plan que se le va a proponer al entrenador. ¿Convencerá este a Baraja? Depende de algunas condiciones.
Es obvio que le van a ofrecer renovar, pero el míster no quiere solo eso, sino un compromiso. Tras tomarse unos días para hacer balance de lo vivido y meditar el próximo paso a dar, Baraja acude a la anunciada reunión abierto a continuar, pero a su vez queriendo dejar claro al club que deben cambiar muchas cosas para que así sea. Para ser exactos, el ídolo del valencianismo ha exigido como objetivos ineludibles aumentar la exigencia, así como que se lleve a cabo la implantación de un proyecto. Con este último punto alude directamente a Peter Lim y al modelo que quiere de club, el cual está más que puesto en entredicho en estos momentos.
En cualquier caso, lo que ocurre hoy no será definitivo. Una vez sea escuchada la propuesta de Baraja, esta debe llegar primero a oídos de Chan para que sea ella la que se la transmita a Lim, quien en última instancia analizará la situación. ¿Es la mejor manera de hacer las cosas? Seguramente no, pero es el peaje que debe pasar Baraja si quiere apretar para conseguir el Valencia que desea.