La reciente derrota del Valencia ante Osasuna ha puesto de manifiesto la situación actual del equipo ché. El rendimiento defensivo mostrado en el partido evidenció una falta de contundencia en la zaga, subrayando así la necesidad de reforzar la delantera y superar la carencia de goles que afecta al conjunto dirigido por Rubén Baraja.
En los veinte partidos bajo la dirección de Baraja, el Valencia solo ha logrado anotar diecinueve goles, lo que equivale a una media de menos de un gol por partido. Este rendimiento sitúa al vallisoletano como el único entrenador en la historia del club con una media de goles a favor inferior a uno por encuentro.
El panorama ofensivo del Valencia se ha visto mermado tras la partida de sus dos máximos goleadores de la temporada pasada, Justin Kluivert y Samuel Lino, quienes regresaron a sus clubes de origen luego de anotar seis goles cada uno. Además, Edinson Cavani, tercer máximo anotador con 5 goles, se trasladó al fútbol argentino. Estos cambios se dan mientras Samu Castillejo, autor de tres goles, parece quedar excluido de los planes de Baraja.
A pesar de que el equipo ha mejorado su registro goleador en la actual campaña con cuatro goles en tres partidos, comparado con los quince goles en diecisiete partidos del ciclo anterior, la necesidad de más eficacia ofensiva es evidente. Incluso el primer gol de Hugo Duro en la liga desde septiembre de 2022 no ha resuelto la cuestión.
Sin embargo, es el sólido desempeño en defensa lo que ha permitido a Baraja mantener un balance aceptable como entrenador del Valencia. En sus veinte partidos al mando, ha obtenido ocho victorias, cuatro empates y ocho derrotas. Con solo 21 goles encajados, se sitúa como el décimo técnico con el mejor porcentaje de goles en contra en la historia del club.
A pesar de la estabilidad defensiva, Baraja reconoce la necesidad de refuerzos, especialmente en la zona ofensiva, como lo ha manifestado en varias ocasiones. A pesar de la incorporación de Sergi Canós como extremo, el entrenador vallisoletano espera más incorporaciones antes del cierre del mercado.
La búsqueda de nuevos fichajes es una señal clara de que tanto Baraja como la afición valencianista reconocen la importancia de suplir a jugadores clave como Cavani, Lino y Kluivert, así como a otros como Marcos André, Castillejo, Lato y Cömert. La necesidad de un delantero se hace aún más evidente ante la lesión de Alberto Marí y la falta de alternativas en el puesto de nueve.
Rafa Mir, un delantero pretendido desde hace semanas, podría ser la solución a esta carencia ofensiva. Sea con él u otro futbolista, está claro que el Valencia necesita fortalecer su frente de ataque para recuperar la contundencia y aspirar a mejores resultados.