El Mundial de Qatar 2022 ha debido ser todo un fracaso para Hugo Guillamón, quien se marchó de Qatar sin disputar ni un solo minuto, en parte debido a las molestias que el jugador del Valencia CF padecía, molestias que no llevaron a Luis Enrique a prescindir de él, como sí hiciera con su compañero de club José Luis Gayá. Pero Guillamón ahora no afrontará las vacaciones como cualquiera de los otros 25 internacionales con España, tendrá que dedicar gran parte de su tiempo a sus estudios, puesto que el futbolista valencianista estudia Ingeniería Biomédica.
La Universitat Politécnica de València, donde Hugo Guillamón cursa el grado de Ingeniería Biomédica, emitió una nota de prensa alabando la voluntad del futbolista de compaginar su carrera deportiva con los estudios, donde Guillamón es uno de los más destacados de su curso, ya en tercero. "Hugo es un chaval muy bien orientado, discreto y responsable. Lleva muy bien su doble vida", dice la UPV en su comunicado. Guillamón no solo tendrá que incorporarse a los entrenamientos del Valencia, también tendrá que volver a clase como un alumno más.
Muchos son los casos de jóvenes futbolistas que, desde muy corta edad, fían su futuro a una supuesta carrera exitosa en el deporte profesional que, en la mayoría de casos, jamás llega a producirse. Incluso aquellas excepciones puntuales que se hacen un hueco en la élite, en muchas ocasiones, echan en falta una mejor formación para gestionar su futuro una vez retirados del mundo del fútbol, si es que no, directamente, acaban arruinados.
"No tengo tiempo para estudiar", "necesito centrarme al 100% en mi carrera futbolística", y frases similares, son demasiadas veces el preludio de situaciones, en algunos casos, de extrema gravedad a nivel personal.
Afortunadamente, cada día más, los jóvenes deportistas entienden la formación como un aspecto clave para su futuro, y compaginan su vertiente profesional con la académica, estableciendo las bases para realizarse y vivir una buena vida a medio y largo plazo.
Un claro ejemplo de que ‘sí se puede’ es Hugo Guillamón, el joven futbolista del Valencia Club de Fútbol que no solo demuestra su polivalencia sobre el césped, sino también más allá de él. No en vano, a sus apenas 22 años, Guillamón estudia tercero de Ingeniería Biomédica en la Universitat Politècnica de València (UPV), lo cual no le ha supuesto impedimento alguno para ser convocado por Luis Enrique para luchar con la Selección Española por la segunda estrella en el Mundial de Catar.
"Hugo es un chaval muy bien orientado, discreto y responsable. Lleva muy bien su doble vida", afirma Alberto Ferrer Riquelme, su profesor de Estadística en la UPV.
"Es uno más dentro de la clase. No pretende nunca que se le dé ningún tipo de consideración especial, y ello a pesar de que, como deportista de élite, tiene derecho a solicitarla", explica Ferrer Riquelme, que considera a Guillamón "un buen modelo para el resto de universitarios. Hay veces que la gente con menos tiempo libre es capaz de organizarse mejor y sacarle más provecho a ese tiempo".
"Mi asignatura no es fácil", indica el profesor e investigador de la UPV, "y no solo la aprobó a la primera, sino que, además, la aprobó bien aprobada. Y ello sin pedir ningún tipo de favor ni de exención. Lleva su responsabilidad con mucha dignidad y discreción".
"Es un buen alumno", sentencia Ferrer Riquelme, que reconoce "el mérito que tiene sacar adelante los estudios teniendo que viajar, entrenar, jugar… De todos modos, su caso no es único, ya que hay otros estudiantes que, como él, gestionan extraordinariamente la combinación de los estudios con otras responsabilidades laborales o, por ejemplo, de cuidado de familiares".