El duelo de este sábado entre el Valencia y el Real Madrid dejó muchos detalles a tener en cuenta. En el cuadro valencianista, jugó un antiguo canterano merengue, Peter Federico, quien buscó con ahínco anotarle un gol al equipo en el que se formó. Esto no le sentó nada bien a una parte de la que fue su afición, y así se lo hicieron saber en redes sociales, lanzándole lamentables insultos y muestras de racismo.
Desde que finalizó el encuentro, no fueron pocos estos mensajes de odio hacia un futbolista que se encontraba en el desempeño de su profesión. De tanta magnitud se hizo el asunto que el propio Peter Federico tomó una drástica decisión. En las últimas horas, el jugador del Valencia optó por cerrar la sección de comentarios de su cuenta personal en Instagram.
Ante la catarata de mensajes tan inaceptables, su club quiso apoyarle de forma pública. A través de sus redes sociales, el Valencia quiso dejar claro su compromiso con Peter Federico, a la vez que fue contundente acerca de los comentarios racistas que ha sufrido en las últimas horas su joven futbolista a través de dichas plataformas.
“El Valencia reitera su compromiso en la lucha contra la discriminación en cualquiera de sus formas. Son totalmente inadmisibles algunos comentarios fomentando el odio que está recibiendo nuestro jugador Peter Federico. Por un fútbol y una sociedad libre de discriminación y violencia”.
En las últimas horas, las redes sociales se han llenado de insultos y de faltas de respeto hacia el futbolista, que todavía pertenece al Real Madrid. Emoticonos de ratas, mensajes con un claro componente racista… estos son algunos de los ‘post’ que se le han enviado a un jugador que entró en la cantera merengue con apenas 15 años.
"No muerdas la mano que te dio de comer, cabeza de nido, en patera te tenías que haber ido"; "qué se puede esperar de alguien de un país como Dominicana, suerte cabeza de nido" o “si no llegar a ser por el Madrid, estabas repartiendo comida en Uber”. Estos han sido solo algunos de los mensajes que ha tenido que recibir a través de redes sociales, y por los que decidió cerrar la sección de comentarios de su Instagram.
Todo vino a raíz de una acción ofensiva en la que el futbolista del Valencia quiso marcarle al que fue su equipo. En los últimos minutos del encuentro, tuvo el que pudo ser el tercer gol valencianista, con un lanzamiento desde el lateral del área que se fue algo por encima de la portería defendida por Lunin. Tras ello, levantó los brazos, buscando que Mestalla fuera una olla a presión, lo que no ha sentado nada bien a algunos aficionados merengues.