La situación de la UD Almería es extrema. Colista con sólo cinco puntos, aún no sabe lo que es ganar cuando se llevan 18 jornadas disputadas. Tras la marcha de Rubi al término de la temporada pasada, los andaluces no levantan cabeza. Vicente Moreno fue destituido a finales de septiembre y la llegada de Gaizka Garitano tampoco arregló los problemas de un equipo que hace aguas atrás. Con 42 goles en contra, la defensa indálica ha quedado en evidencia. El año 2024 llega con la intención de reparar la planificación deportiva realizada en verano. Acertar en el mercado invernal es la única y última esperanza para su propietario, Turki Al-Sheikh.
Nadie en Almería podía presagiar esta debacle deportiva de la entidad. Después de lograr la salvación in extremis la campaña 22/23, el equipo se reforzó gastando dinero. Se pagaron 14 millones por el mexicano César Montes al Espanyol, y lo convirtieron en el fichaje más caro de la historia del club. Además se efectuó la opción de compra por Luis Suárez y se abonaron buenas cantidades en jugadores como Ibrahima Koné (7.50 millones), Dion Lopy (6.50 millones), Sergio Arribas (6 millones), Marc Pubill (5 millones) o Edgar González (4.5 millones). Pero nada ni nadie está dando el resultado esperado. Entre lesiones y bajo rendimiento.
Sobre el ministro saudí y dueño del Almería, Turki Al-Sheikh, recae toda la responsabilidad de las operaciones. La dirección deportiva está liderada por Joao Gonçalves y El Assy, pero es él la persona de dar el visto bueno a las operaciones. Y la afición espera una gran revolución en el mercado invernal para tratar de evitar el triste desenlace del descenso a Segunda división.
A través de las redes sociales, el dirigente árabe se encargó de felicitar el año nuevo: "Les deseo a todos bien, paz y felicidad con motivo del nuevo año y tengo a Dios como testigo de que he perdonado a todos los que me hicieron daño o me molestaron...", publicó en su cuenta de X (antes conocida como Twitter).
Por su parte, el equipo ya está trabajando de la mano de Garitano la vuelta a la competición. Porque el Almería jugará su primer partido de 2024 en El Sadar el próximo 4 de enero ante Osasuna. Conseguir el primer triunfo ha de ser el primer paso hacia un nuevo camino. Este lunes se abre la veda de fichajes y eso ya es tarea de precisión y también fortuna.