El descenso matemático de la UD Almería puede consumarse en la próxima jornada, pues sólo restan por disputarse 18 puntos y el conjunto rojiblanco está a 17 de la salvación. Por ello, en las oficinas del Power Horse Stadium se trabaja ya desde hace tiempo con la mente puesta en la próxima campaña.
Tras el fracaso de esta temporada, se esperan muchas salidas en verano. Hay jugadores que no tienen cabida en el nuevo proyecto y otros que serán utilizados para hacer caja y tratar de paliar los efectos económicos del descenso.
En este último grupo se encuentra Idrissu Baba, que ha dejado de ser titular con Pepe Mel en el banquillo e incluso iba a hacer las maletas antes de que acabara el curso. De hecho, ya estaba todo acordado para su traspaso al New England Revolution de la Major League Soccer.
El mercado de fichajes en la competición estadounidense finaliza este martes 23 de abril y las negociaciones se habían acelerado en las últimas horas. El centrocampista ghanés, de hecho, ya viajaba hacia Barcelona, con permiso del club, para pasar el reconocimiento médico. Pero una inesperada falta de acuerdo final en las cifras del traspaso ha dado al traste con la operación cuando parecía cerrada, según informa Relevo.
Sin tiempo ya para retomar las conversaciones, se frustra de este modo una buena oportunidad tanto para la UD Almería como para el propio jugador, que ha recibido la noticia como un jarro de agua fría.
En realidad, también existía un problema que solventar para poder formalizar el traspaso, pues Baba se encuentra cedido por el Mallorca y para poder ser vendido debía ser previamente propiedad del club andaluz, que pese a todo tendrá que comprarlo a final de temporada.
El mediocentro africano aterrizó el pasado verano en una operación que llevó a Samú Costa al conjunto balear a cambio de 3 millones de euros y el préstamo de Baba, aunque en realidad la opción de compra que se guardó la UD Almería es una obligación.
De este modo, el centrocampista volverá a estar en el mercado en verano, pues su rendimiento no ha sido el esperado. A sus 28 años, ha estado a punto de emprender su primera aventura lejos del fútbol español, pues llegó al Mallorca en edad juvenil procedente del Leganés. Una oportunidad que le ilusionaba pese a que el New England Revolution, donde militan los hermanos españoles Carles y Nacho Gil, también marcha colista en la Conferencia Este.