El Almería confirmó matemáticamente la pasada jornada su descenso a Segunda división. La llegada de Pepe Mel al Almería solo ha supuesto, de momento, el primer y único triunfo de los andaluces en lo que va de temporada.
El Almería aún tiene por delante 5 jornadas en las que tendrá que luchar para terminar la campaña de la forma más honrosa posible. A buen seguro que los de Pepe Mel tendrán como objetivo brindarle una victoria a los suyos. Tendrán 2 oportunidades, la primera ante el Barcelona en la 36 y la segunda ante el Cádiz en la 38.
A pesar de este objetivo, más bien moral para el Almería, el conjunto de Pepe Mel ya empieza a pensar en la próxima temporada. El cuadro indálico tendrá que bajar al infierno de la Segunda división y el objetivo no debe ser otro que ascender.
La historia de descensos a Segunda división ya anuncia que esto no será sencillo, más si cabe cuando el Almería tendrá que afrontar una importante regeneración de la plantilla, habiendo solo un jugador que termina contrato el próximo 30 de junio (Diego Mariño).
Por lo tanto el Almería deberá negociar prácticamente con toda la plantilla para ver cuál es el mejor encaje, si permanecer en el equipo en Segunda división (con rebaja de sueldo incluida) o buscar una salida a otro equipo.
Lo que si tiene claro la entidad de la que es dueño Turki es que no se venderá a cualquier precio y las ofertas que lleguen, tendrán que ser acordes a las pretensiones del Almería. Algunos de los jugadores que tienen mejor cartel en el Almería y con los que se podría hacer caja son Pubill, Arribas, Lopy y Luis Suárez. Este último no dejó claro hace escasos días su futuro.
Pepe Mel, a pesar de que su continuidad más allá del 30 de junio no está aún garantizada, está teniendo una función vital en el futuro del Almería ya que con el trabajo realizado estas semanas está sirviendo de filtro de cara a la dirección deportiva. Pepe Mel está facilitándole el trabajo al director deportivo Joao Gonçalves ya que de este modo, el encargado de la dirección deportiva tendrá suficientes mimbres para decidir quién sigue o no la próxima campaña.
Entre tanto, el Almería deberá bajar su gasto salarial ya que el equipo se confeccionó para estar en Primera división y el descenso a los infiernos ha pillado desprevenidos a la gran mayoría por lo que es más que probable que se produzcan salidas importantes, incluso de jugadores que han funcionado esta campaña pero que por su alto salario es imposible mantenerlos en Segunda con la rebaja presupuestaria que se produce tras un descenso.