Alejandro Sáez4 min lecturaLa UD Almería se hizo el pasado verano con los servicios del joven zaguero brasileño Kaiky Fernandes, quien a sus 18 años arribó al Power Horse Stadium procedente del Santos a cambio de siete millones de euros por el 70% de los derechos del central. Una operación en la que el conjunto brasileño se reservó, también, el 20% de la plusvalía de una futura venta de Kaiky, que firmó como almeriense hasta 2028.
Desde entonces, el prometedor futbolista brasileño no ha acabado de asentarse en los planes de Rubi pese a comenzar la temporada como titular. En los últimos meses ha alternado el banquillo con participaciones en las que, incluso, ha completado los partidos en la retaguardia rojiblanca. Una auténtica montaña rusa que tiene su explicación en la juventud del futbolista, su progresiva adaptación al fútbol europeo, en general, y a LaLiga, en particular, así como a las necesidades deportivas de un Almería que en septiembre llegó a protagonizar una racha de cuatro derrotas consecutivas.
En definitiva, una temporada de adaptación a la elite europea que, entre otras cosas, empujó al FC Barcelona el pasado mercado a no ejercer el derecho prioritario del que disponía sobre Kaiky Fernandes, al entender Xavi y su cuerpo técnico que requería de centrales más experimentados, como era el caso del sevillista Koundé, al que acabaron firmando.
El Barça disponía de un derecho de tanteo sobre Kaiky en base a un acuerdo con el Santos por una deuda pasada relacionada con Gabigol. Para ello, Kaiky tendría que ser vendido por un precio superior a seis millones de euros, llegando el caso de que los azulgranas pudieran igualar la oferta y, de esta manera, quedarse al brasileño en propiedad. Los culés, sin embargo, nunca acabaron de mover ficha, lo que posibilitó que Kaiky recalara en el Almería, donde, eso sí, lo siguen muy de cerca por si acaba de dar el estirón en España esta temporada.
Según publica ahora Sport, una comitiva del FC Barcelona presente en la pretemporada culé en Miami se reunió con el agente del futbolista, que ya estaba en el Almería, para tratar de firmarle una nueva opción de compra preferencial con un precio cerrado para el futuro. El Almería, sin embargo, nunca accedió a ese tipo de operación, similar a la que el Barcelona había cerrado con anterioridad con el Betis por el también brasileño Emerson Royal.
Ahora, Kaiky viene destacando en LaLiga por su buena salda de balón y su rapidez de movimientos, siempre dotados de técnica. De ahí que desde Sport sigan insistiendo que en la secretaría técnica culé no se han olvidado de él. Para ello, eso sí, tendrán que llegar a un acuerdo con la UD Almería, que lo tiene amarrado hasta 2028.
La cláusula de rescisión del prometedor Kaiky, además, no invita a especular, siendo el Almería el que tendría la sartén por el mango siempre que se niegue a negociar. En el Camp Nou ya saben que la cláusula de rescisión del central se eleva hasta los 80 millones de euros.