Hasta ahora, Víctor Orta no ha tenido mucho tino con los delanteros que ha fichado para el Sevilla FC. En su primer mercado al frente de la dirección deportiva apostó por Mariano Díaz, hoy día sin equipo tras su pobre paso por Nervión la campaña pasada. En enero, por su parte, eligió al argentino Alejo Véliz, cuya participación fue testimonial. Y el pasado verano se decantó por Kelechi Iheanacho, que se ha convertido en el centro de las críticas tanto de la afición sevillista como en su país, donde dudan de su continuidad en la selección de Nigeria.
En el pasado, por su parte, el actual responsable de la planificación nervionense también tuvo otro importante lunar en lo que a la elección de delanteros se refiere. Fue cuando trabajaba en el Leeds United, aunque en este caso el error no vino por el jugador que fichó, sino por el que dejó escapar. En concreto, Viktor Gyökeres, uno de los artilleros más en forma de toda Europa, por el que suspiran algunos de los clubes más potentes del continente.
A sus 26 años, el internacional sueco cumple su segunda temporada en el Sporting de Portugal y nadie duda de que no estará mucho más tiempo en sus filas. Suma 66 goles en 68 partidos oficiales con el conjunto luso y el Manchester United ya se ha mostrado dispuesto a abonar su cláusula de rescisión de 100 millones de euros. Pero antes de que explotase en Lisboa, estuvo sobre la mesa de Orta, que lo rechazo.
“Cuando estaba en Leeds United, no quise pagar 14 millones de euros por él. Casos como el de Gyökeres son las gratas sorpresas que ofrece el fútbol, esas cosas que no podemos predecir”, desveló el actual director deportivo del Sevilla FC durante una charla en Portugal.
El ofrecimiento le llegó después de que Gyökeres ya diese muestras de su potencial goleador con el Coventry en la Championship, la segunda inglesa. Antes, tras destacar en el Brommapojkarna de su país, fue adquirido por el Brighton con sólo 19 años por un millón de euros, pero en una campaña y media sólo jugó 8 partido e hizo un tanto, por lo que fue cedido consecutivamente a St. Pauli, Swansea y Coventry, que acabó apostando por su fichaje y acabó traspasándolo por 24 millones tras hacer 43 goles en 116 partidos. Un rendimiento que, sin embargo, no acabó de convencer a Orta. A buen seguro, en el Leeds United se estarán tirando de los pelos.