Víctor Orta pasa un mal rato, pero toma nota

Este domingo le tocó a Víctor Orta, como hace dos semanas, en los prolegómenos del Sevilla Atlético-Sanluqueño, a José Castro, representantes de la cúpula nervionense en los dos últimos encuentros en el Estadio Jesús Navas del primer filial. El director deportivo blanquirrojo asistió, vestido de calle, al palco del campo principal de la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, aunque fue reconocido enseguida por los más de 2.000 espectadores (asistieron 2.200, pero con una amplia representación de hinchas del Antequera CF) que se dieron cita, sobre todo los de la grada grande, la mayoría de los cuales se volvió hacia donde estaba para abroncarle y entonar el ya clásico 'directiva, dimisión', una situación incómoda que soportaron estoicamente el madrileño y sus acompañantes. No hubo carteles amarillos ni camisetas de censura a Del Nido Carrasco, según algunas denuncias en las redes al invitar la seguridad del recinto a sus portadores a que se las quitaran.

Sea como fuere, pese al mal rato, Orta pudo tomar buena nota de las evoluciones de algunos futbolistas interesantes para el primer equipo, que acusa las bajas en la parcela ancha de Albert Sambi Lokonga y Djibril Sow (el mediocentro Alberto Collado selló con un tanto el 2-2 definitivo, tras ponerse dos goles por debajo la escuadra de Jesús Galván), además de las más leves del central Marcao Teixeira (recién operado de una fractura nasal, aunque disponible a corto plazo con una máscara) e Isaac Romero (con un esguince leve de tobillo que podría suponerle una ausencia de muy corta duración). Para el eje del centro del campo sigue opositando Manu Bueno, casi siempre de los más fiables del Sevilla Atlético, siendo el autor de la asistencia en el tanto de la igualada. Atrás, la polivalencia de Ramón Martínez, que ya sabe lo que es jugar y marcar con los grandes en pretemporada, siempre es un plus.

Volviendo a la pitada al responsable máximo de la planificación del Sevilla FC, queda patente que el clima social no es precisamente el más halagüeño, con una junta extraordinaria a la vuelta de la esquina, tras una protesta masiva de la afición antes del encuentro ante el Getafe CF, movilizaciones para que haya otra el martes en las horas previas al duelo ante el Real Valladolid (de momento, menos multitudinaria en seguimiento, quizás por la hora y por tratarse de una jornada laborable) y una recogida de firmas por parte de la Federación de Peñas Sevillistas para pedir el cese o la dimisión del actual consejo de administración.