El Sevilla está metido en un problema con el límite salarial. LaLiga le ha impuesto un límite de coste de plantilla deportiva (LCPD) de 2'499 millones de euros la cual excede por mucho ya que el gasto real del equipo de Nervión se sitúa en los 108 millones de euros aproximadamente. Esto provoca que el Sevilla tenga limitaciones a la hora de fichar futbolistas estando obligado a dar salidas antes de realizar incorporaciones, las cuales están limitadas por una serie de parámetros. Con este contexto, el Sevilla explora soluciones, siendo la mejor poder darle salida a los jugadores que tienen mayor salario en la actual plantilla.
Operaciones que no serán nada fácil para el Sevilla que tiene en Nianzou, Marcao, Suso y Gudelj algunos de los futbolistas que más dinero ganan por temporada en la actual plantilla. Ya sea por bajo rendimiento o por veteranía, la salida de estos cuatro jugadores está bastante complicada lo cual provoca que el club de Nervión no puede desprenderse de sus altos salarios y, por tanto, tener margen, muy limitado, para realizar fichajes en el futuro.
El caso más grave es el de Nianzou. Tal y como informamos en ESTADIO Deportivo, el central francés se embolsa alrededor de tres millones de euros por temporada, una cifra que ahoga el límite salarial del Sevilla. Además de ello, el zaguero es un futbolista que no entra en los planes del Sevilla tal y como se demuestra el hecho de que Nianzou sólo jugara el primer partido contra Las Palmas y luego no haya participado en los tres siguiente. Con ese salario, su escaso rendimiento y con contrato hasta el 30 de junio de 2027, su salida parece imposible.
Por otro lado está Marcao que a sus 28 años tiene el problema de las lesiones como principal hándicap para encontrarle equipo. Su sueldo también es elevado y tiene contrato hasta el 30 de junio de 2027. Su poca continuidad en las últimas dos temporadas, sólo ha disputado 21 partidos, han hecho que ningún equipo haya preguntado por él en el pasado mercado de fichajes de verano.
En otra situación está Suso. El atacante es de los más longevos en la plantilla del Sevilla y eso provoca que su contrato fuera firmado cuando el Sevilla jugaba UEFA Champions League. Lastrado por las lesiones, el futbolista ha ofrecido bajarse el sueldo, pero en el Sevilla tienen claro que seguirá la línea marcada con Óliver Torres. Cuando acabe contrato, al final de la actual temporada, lo dejará marchar libre.
Por último, está el caso de Gudelj quien se rebajó el salario hace poco renovando hasta el 30 de junio de 2026. Con 32 años, no hay equipos que igualen el sueldo que gana en el Sevilla por lo que su salida parece difícil.
Así pues, no lo tiene nada fácil el Sevilla para liberar salarios para acometer fichajes. Hasta que no compense el exceso salarial de esta temporada, fijado en unos 105 millones de euros aproximadamente, el club de Nervión sólo podrá gastar un 60 por ciento del sueldo liberado por cada futbolista y sólo podrá invertir en fichajes un 20 por ciento por lo ingresado por traspasos de jugadores.