La tibia respuesta de Saúl al enfado de Akor Adams

El Sevilla FC volvió a sucumbir de la manera más cruel ante el Atlético de Madrid para firmar su tercera derrota consecutiva. Tras adelantarse en el marcador gracias a un golazo de Agoumé, los de García Pimienta vieron como el cuadro colchonero les remontaba, al igual que sucedió en El Gran Derbi, merced a un penalti evitable cometido por Badé en la primera mitad y un tanto de Barrios en el tiempo de prolongación. Un triste desenlace que hizo estallar más si sabe a una afición hastiada, que puso el grito en el cielo para pedir de forma unánime la marcha de Del Nido Carrasco.

El encuentro sirvió para ver la primera titularidad de Akor Adams con la camiseta blanquirroja. Tras debutar ante el Getafe y caer lesionado, el nigeriano estuvo un mes y medio lesionado y entró al fin en el once tras haber gozado de minutos en los dos últimos choques frente al Athletic y el Real Betis. Pero su actuación dejó mucho que desear. Por arriba ganó algunas, pero con el balón en los pies se le vio descoordinado y falto de la chispa necesaria. Sin duda, no fueron las mejores sensaciones de un fichaje que aterrizó en enero como un refuerzo necesario para ayudar a paliar la falta de eficacia ante la meta rival y cuyo balance se resume hasta la fecha en 131 minutos y cero goles.

Tras el partido, el ex del Montpellier mostraba su enfado mientras el equipo se retiraba a los vestuarios. Pero sus lamentos no encontraron demasiada complicidad en Saúl Ñíguez, uno de los capitanes del plantel, quien quedó señalado en el gol que decidió el duelo al perseguir a Barrios durante muchos metros sin alcanzar a hacerle falta siquiera. Pese a ello, la respuesta del ilicitano fue cuanto menos tibia cuando su compañero le mostraba su malestar.

"Lo teníamos y lo tiramos", exclamó Akor Adams, como se aprecia en las imágenes recogidas por Movistar, recordándole Saúl que el desenlace fue "igual que con el Mallorca", cuando los bermellones igualaron a uno merced a un error de Nyland también en el alargue. Pero el ariete africano insistía en su desazón. “El Atleti… Lo teníamos y se nos ha escapado. Los teníamos durante 90 minutos y lo hemos perdido en dos minutos, en dos minutos”, insistió, sin apenas encontrar respuesta por parte del centrocampista, que sólo reaccionó con gestos de resignación y otra escueta frase: "Otra vez tío".

Después del partido, el delantero atendía a los medios del club y volvía a lamentarse. "Creo que merecimos sacar algún punto en este partido. Dimos lo mejor de nosotros mismos. En la primera parte jugamos con mucha intensidad y en la segunda quizás nos faltaron más ataques. Lo más importante es sacar puntos en cada partido”, destacó.