Suso tenía en el día de ayer una reválida. El extremo gaditano no era titular con Jorge Sampaoli desde el partido de la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions League ante el Copenhague, el pasado 25 de octubre de 2022 y que el Sevilla acabó ganando por 3-0 para certificar su presencia en la Europa League. De hecho, ni el propio Suso recordaba ya la última ocasión en la que jugaba de inicio, como él mismo recordó tras el partido de anoche.
"Me he visto bien, hacía mucho tiempo que no jugaba de titular y que no jugaba los 90 minutos, pero bien", admitía el '7' sevillista. Y es que para ver la última vez en que el gaditano disputó un partido completo con el Sevilla hay que retroceder hasta la temporada 2020/2021, concretamente al 20 de marzo de 2021 y a la jornada 28 de LaLiga, donde el Sevilla logró un milagroso empate gracias a Bono en el último suspiro del partido ante el Real Valladolid en el José Zorrilla. Muchas titularidades en aquella temporada para el gaditano con Lopetegui en el banquillo, aunque casi siempre era uno de los sustituidos en la segunda parte.
La pasada campaña, marcada por una grave lesión de tobillo desde el mes de noviembre le mantuvo lejos de los terrenos de juego varios meses, diciendo adiós precipitadamente a la temporada. Este verano comenzó como uno más pero le costó dejar atrás el recuerdo de esa lesión, jugando muy poco en LaLiga, algo más en Champions y no ha sido hasta después del parón del Mundial, en el que Sampaoli siempre lo destacó como uno de los que mejor entrenó hasta que volvió a sentir unas molestias musculares, cuando Suso ha vuelto a tener continuidad. Es decir, casi un año en blanco, con una grave lesión y otras dolencias menores que le han impedido regresar al mejor Suso que vio el Sevilla, el de su primer medio año en Nervión culminado con la Europa League de Colonia.
Ya contra el Getafe, hace cuatro jornadas, Suso comenzó a dejar buenos minutos sobre el campo, que se han visto reforzados con sus últimas apariciones frente al Cádiz, dando el pase de gol que acabó en el penalti que convirtió Rakitic, y ante Osasuna en Copa con una asistencia a En-Nesyri. Una buena noticia de la que Sampaoli se congratulaba en la rueda de prensa previa al partido ante el Elche.
"Suso fue el asistidor de los dos últimos partidos. Tuvo remates y condiciones de remate, eso para mí es un muy buen desempeño, es un futbolista cualitativo. Necesita ponerse en forma, lo está haciendo y en forma nos puede dar eso que yo reclamaba anteriormente, puede generar situaciones de remate, asistencia, de poner a un compañeros en situación de remate. Iba muy bien en pretemporada, se lastimó y ahora se está recuperando otra vez", decía el argentino sobre su pupilo.
Hasta que ayer le dió no solo la titularidad sino los 90 minutos. Y Suso no despercidió la oportunidad. Jugando por la banda derecha, el '7' del Sevilla demostró entenderse muy bien tanto con Jesús Navas como con Montiel, al que sirvió un gran pase filtrado de 40 metros en el inicio de la jugada del segundo gol. Montiel acabaría poniendo atrás el balón para el disparo de Óliver, y cuyo rechace Acuña enviaría al fondo de la portería.
No contento con ello, el gaditano sacó a relucir de nuevo su buen toque con una asistencia a En-Nesyri picando el balón en la frontal para dejar al marroquí en un mano a mano que no desaprovecharía. Un 93% de precisión en el pase y jugadas marca de la casa caracoleando en el borde del área para encontrar su ángulo de tiro. Además propició la jugada clave del partido, robando el balón a Pedro Bigas en la presión y provocando una falta que le costaría la tarjeta roja al central franjiverde. Una buena noticia, sin duda, si Sampaoli es capaz de darle la regularidad necesaria para volver a recuperar la mejor versión de Suso en el Sevilla.