Aunque, obviamente, hay muchos otros factores, y bastantes más importantes, a la hora de atraer y convencer a un futbolista, el Sevilla FC cuenta de su lado con una importante baza que muchos elogian: la pasión de sus aficionados. El propio Saúl Ñíguez, cuyo fichaje ha sido posible gracias en buena medida a su esfuerzo económico, no dudó en destacar en su presentación cómo el coliseo de Nervión se transforma en una olla a presión que sufrió muchas veces con la camiseta del Atlético de Madrid, destacando su felicidad por poder tenerla ahora de su lado.
"Yo debuté en Liga aquí contra el Sevilla. Siempre se vive un ambientazo y es difícil jugar aquí como rival. Sería muy positivo eso, que en cada partido explote el Sánchez Pizjuán, que vayamos todos a una y nosotros transmitirles desde el campo", explicó el nuevo centrocampista blanquirrojo. Pero que se expresen así quienes pertenecen al club entra dentro de lo esperado.
Lo llamativo, en cambio, es que otros sin relación aparente con el conjunto hispalense cataloguen a la afición sevillista como la mejor. Eso es lo que ha hecho el veterano Lucas Pérez, estrella de un Deportivo de La Coruña que ha vuelto a Segunda división tras un brillante ascenso al que el delantero gallego contribuyó con 15 goles y 19 asistencias, tras sorprender hace año y medio a todos al dejar el Cádiz, con el que jugaba en la máxima categoría, para regresar al equipo de su tierra.
En un entretenido reto con Mandayo, joven creador de contenido en Tik Tok, el ex atacante del Arsenal y el West Ham, entre otros, fue componiendo su equipo perfecto, decantándose en primer lugar por el escudo del conjunto coruñés. Tras ello, llegó su guiño al club de Nervión: "¿Una afición? La del Sevilla". Sin poder repetir equipo, continuó eligiendo estadio (Santiago Bernabéu), entrenador (Pep Guardiola), estrella (Leo Messi) y promesa (el deportivista Yeremay Hernández).
Como rival, Lucas Pérez ha visitado en cuatro ocasiones el Sánchez Pizjuán y ha sufrido en sus carnes a una afición que históricamente guarda muy buena relación con la del Deportivo. Con el cuadro gallego jugó en dos ocasiones en el feudo sevillista, otra con el Alavés y otra con el Cádiz. Pero además se da la curiosidad de que su penúltimo gol en la máxima categoría fue ante la hinchada que ahora ha elogiado, al anotar de falta en el 1-1 ante el conjunto cadista en la campaña 21/22.