A sus 34 años, Wissam Ben Yedder continúa sin equipo tras abandonar el Mónaco el pasado 30 de junio. En todo este tiempo, ha sonado para varios clubes brasileños, como Corinthians, Flamengo o Palmeiras, apuntándose igualmente la posibilidad de su desembarco en Arabia Saudí. Incluso, hubo aficionados sevillistas que pidieron su regreso a Nervión a través de las redes sociales, algo que el Sevilla FC no ha barajado. Pero la principal preocupación del delantero francés es otra muy diferente ahora mismo. Envuelto en el proceso aún abierto junto a su primo por un presunta violación a dos jóvenes en julio de 2023, el pasado mes de septiembre fue detenido por una acusación de agresión sexual en estado de ebriedad, por la cual ha sido juzgado este pasado martes en Niza.
Durante la vista, la Fiscalía solicitó una pena de dos años y medio de prisión para el que fuese internacional galo, de quien afirmó que "consideraba que la víctima era un trozo de carne". Ben Yedder, por su parte, ni siquiera negó los hechos, asegurando no recordar "nada" de lo sucedido debido a estado de embriaguez. "No puedo decir si lo hice. Es por el alcohol que estoy aquí. Pido perdón sinceramente a la víctima, a su familia, a mi familia", afirmó.
A la espera, por tanto, de conocer la sentencia el próximo 12 de noviembre, el futbolista natural de Sarcelles fue más allá y reconoció su alcoholismo, destacando al respecto su defensa los esfuerzos que está realizando para tratar de solventar ese problema. Para ello, se ha sometido a un tratamiento de desintoxicación de dos semanas en el Hospital Universitario de Niza, además de unirse a Alcohólicos Anónimos.
"El alcohol me hizo olvidar, me ayudó a dejar de pensar. Me doy cuenta de que fue el peor error de mi vida. Soy una persona solitaria, me cuesta confiar en la gente. Me traicionaron en muchas historias y me refugié en el alcohol", explicó el atacante en una declaración que reproduce el diario L'Equipe.
Así mismo, una de sus abogadas hizo referencia durante el juico a esos problemas personales para poner de relieve la difícil situación por la que atraviesa el jugador, concretando que fue traicionado por su antiguo agente y defraudado por su administrador financiero, viendo por otro lado cómo se ha roto su matrimonio. De hecho, aún tiene otra causa más abierta, por la que deberá declarar a finales de diciembre, debido a una denuncia por “violencia psicológica” presentada por su ex pareja.
Pese a todo ello, la idea de Ben Yedder es recuperarse de su adicción al alcohol y poder firmar por un nuevo equipo en el mercado de enero. Se apunta incluso que no le faltan ofertas para ello, aunque su situación procesal supondrá a buen seguro un freno para muchos de los posibles clubes interesados.