Sufrido triunfo del Sevilla FC ante el Real Valladolid (2-1). El conjunto rojiblanco cosechó este martes la segunda victoria de la temporada, de nuevo con el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán como denominador común, en un duelo balsámico, bastante ajustado y que elevó la tensión hasta el pitido final, dado que el partido pudo decantarse para ambos lados de la balanza. Fue Ejuke quien cortó de raíz la agonía con un disparo cruzado en un choque donde los locales acabaron con uno menos, tras la expulsión de Marcao, y con varias noticias negativas, tras la grave lesión de Saúl Ñíguez. A este gran volumen de sucesos se unió la sorprendente y llamativa manera de anunciar la renovación del técnico García Pimienta, quien acalló las críticas tras sumar un nuevo triunfo, cuyo contrato ha sido ampliado una temporada más hasta 2027. Una forma inmejorable de celebrar una ansiada victoria, que pese a la imperiosa necesidad, no dejó satisfecha a la afición. Así lo pudo comprobar este medio, que tras el partido midió el grado de emoción de los hinchas rojiblancos presentes en el partido.
A nivel general, el sevillismo se marchó conforme con la victoria, aunque no así con el juego del equipo: "No, no estoy contento. Estoy contento de haber ganado, no del partido. Para mí el Sevilla es un equipo de permanencia", respondía un aficionado. "Hemos ganado, pero esta es nuestra liga. Ganarle al Valladolid y a estos equipitos, para intentar quedar donde podemos", espetó este otro, sumándose a colocar al Sevilla en la lucha por la parte baja de la tabla.
En este sentido, hubo consenso en las críticas de una afición que sufrió de lo lindo para ver la segunda victoria de la temporada: "No solamente es ganar. Es dar una imagen de equipo grande. Si el Valladolid te lía esto, no te quiero contar cuando venga un equipo medio decente", expresaba un hincha. "Un engaño de equipo. Esto es una vergüenza de equipo, lo que tenemos. No salgo contento ni con la victoria. No se puede sufrir tanto con un Valladolid", achacó este otro.
Por su parte, este otro aficionado se sumaba a las quejas generales, aunque ponía el foco en la planificación: "El problema que yo le veo al Sevilla es que no hay jugadores, no hay calidad, y el Sevilla siempre ha tenido en toda su historia de dos a tres jugadores que han sobresalido en Europa y en España, y ahora no lo tenemos".
Con todo, la victoria supone un alivio para un equipo que empieza a respirar en medio de un ambiente de desánimo, acrecentado por la dolorosa derrota en Mendizorroza, y a la postre aplacado, o al menos, esa es la idea original, tras la victoria de este martes. Si bien, la afición sevillista mantiene el nivel de pesimismo y exigencia con el que arrancó la temporada y espera ver a su equipo encadenando las victorias que otrora acostumbraba.