Tras los fichajes de Saúl Ñíguez y Sambi Lokonga, ambos en calidad de cedido por Atlético de Madrid y Arsenal, respectivamente, el Sevilla FC aún busca rematar su centro del campo con un nuevo refuerzo. García Pimienta le dio la titularidad al ex colchonero y al belga en el amistoso ante el Sporting de Portugal, formando un trivote en la zona ancha junto a Djibril Sow. Pero al margen de ellos, y de un Gudelj que volvió a ser utilizado como central, el técnico catalán no dispone de más alternativas que la aportación de los canteranos Manu Bueno, Collado y Rivera, toda vez que el club no piensa transigir en el caso del descartado Joan Jordán.
De este modo, Víctor Orta sigue trabajando para completar la medular, barajando futbolistas de diferentes perfiles. Si hace unas semanas se hablaba de negociaciones en marcha por Ilaix Moriba, actualmente concentrado con su selección en los Juegos Olímpicos, esta misma semana ha salido a la palestra el interés en el joven sueco Sebastian Nanasi, con grades registros ofensivos en el Malmoe de su país.
Pero, al mismo tiempo, el director deportivo sevillista no se olvida de Lucien Agoumé, que podría dotar de más músculo el centro del campo. El francés convenció en su paso por Nervión en la segunda mitad de la pasada campaña, aunque sólo pudo disputar 13 partidos debido a una lesión, y García Pimienta habría dado el visto bueno a su regreso. Además, como ya anunció en su despedida, el joven mediocentro galo, de sólo 22 años, también desea volver a vestir de blanquirrojo, pues ya declaró que fue "muy feliz" durante sus seis meses como sevillista. Y esa puede ser una baza decisiva para que el Inter de Milán dé su brazo a torcer.
En este sentido, TuttoMercatoWeb informa que el Sevilla ha acelerado en estos últimos días las gestiones para volver a hacerse con lo servicios de Agoumé, dándose por hecho que saldrá del conjunto 'neroazurro' pese a su buena actuación como central en el último amistoso ante el Pergolettese. Pese a haber recibido propuestas de clubes italianos como el Bolonia o el Udinese y de otros alemanes o franceses, el centrocampista aprieta para regresar al Sánchez Pizjuán y esto habría provocado que se hayan reactivado las negociaciones.
Lo que no se aclara es la fórmula de la posible operación. De un lado, el Inter de Milán ha sido tajante todo este tiempo al exigir un traspaso definitivo, mientras que Víctor Orta pretende lograr una nueva cesión, como mucho con opción de compra, dejando claro en su momento que la pactada el pasado verano, de 8 millones de euros, era "poco realista". En ningún caso se llegará desde el Sánchez Pizjuán a esas cifras, apuntándose en su momento que se podría alcanzar en torno a la mitad.