El Sevilla hace piña en torno al legado de Puerta, el hombre que rompió el techo de cristal

Hay cosas que están por encima de todo y se demuestran en los momentos trascendentales. En sus mejores días de gloria, el Sevilla FC siempre tuvo un espacio para recordar a Antonio Puerta y hacer partícipe de los éxitos a su leyenda. Por el mismo motivo, no deja de ser simbólico que el mayor tramo de dudas en muchísimo años haya coincidido justo con el 15 aniversario de la trágica muerte del hombre que derribó de un zurdazo el techo de cristal, marcando el camino hacia el prestigio nacional y continental que hoy día tiene la entidad de Nervión. El hombre que impulsó al club a cimas inimaginables recordando al club ese grandeza que amenaza con tambalearse.

Este domingo, en jornada de necesaria reflexión interior después de la derrota ante la UD Almería que deja al Sevilla FC con su peor arranque liguero en 40 años (un punto de nueve), la plantilla al completo, el cuerpo técnico con Julen Lopetegui a la cabeza y los dirigentes encabezados por el presidente José Castro se han reunido este domingo en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros para hacer piña y rendir el homenaje que merecen el inolvidable Antonio Puerta y el importante legado que dejó.

En una nota difundida en sus medios oficiales, el Sevilla FC recuerda que este 28 de agosto el club "ha vuelto a cumplir un año más con la tradición del homenaje a Antonio Puerta, cuando se cumplen 15 años de su fatídica marcha al tercer anillo".

"Un 28 de agosto de 2007 que quedó marcado en la memoria de toda la ciudad y que supuso un enorme impacto para el mundo del fútbol en general por lo doloroso de aquella noticia, que dejaba muy al margen cualquier tipo de consideración deportiva cuando apenas unas horas después tocaba jugarse la clasificación para la Liga de Campeones en Grecia", añade el Sevilla FC, junto a una imagen de grupo junto a la estatua que recuerda a Antonio Puerta en la entrada de la ciudad deportiva, donde depositaron un ramo de flores.

Antonio Puerta falleció a los 22 años, tres días después de que el 25 de agosto de 2007 se cayera desplomado sobre el césped del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán en un partido de liga ante el Getafe CF debido a una parada cardiorrespiratoria. Tres lustros después, el legado de la 'Zurda de Diamante' permanece imborrable. En las maduras y, sobre todo, en las duras.