El Sevilla FC ha pisado el acelerador para avanzar en su planificación. Con cuatro fichajes ya realizados, Víctor Orta tiene otros dos refuerzos cerrados, a falta de los habituales flecos de toda negociación. De un lado, se espera que en las próximas horas pueda hacerse oficial la llegada de Kelechi Iheanacho, que firmará como agente libre para convertirse en el sustituto de En-Nesyri, pese al interés de un club de Champions como el Susttugart. Y casi de forma paralela, está cerca de anunciarse también la vuelta de Lucien Agoumé, como ya informó este pasado domingo ESTADIO Deportivo.
El francés arribó el pasado mes de enero y sólo pudo jugar 13 partidos con la camiseta blanquirroja, pues permaneció algunas semanas lesionado. Pero eso fue suficiente para convencer a los técnicos de su valía, recibiendo obviamente el visto bueno de García Pimienta. Tanto es así, que los dirigentes nervionenses están dispuestos a realizar una importante apuesta, teniendo en cuenta la delicada situación económica del club. Así, su fichaje supondría el mayor desembolso hasta la fecha en el presente mercado, donde los sevillistas sólo han pagado para hacerse con los servicios de Peque, cifrado en 4 millones de euros que se abonarán a plazos.
Desde el mismo momento en el que hizo las maletas, a la conclusión de la pasada campaña, el nombre de Agoumé quedó apuntado en la agenda con el fin de intentar su regreso. "Fueron seis meses de aprendizaje para mí. Sevilla, ciudad bonita y club grande. La gente es muy buena conmigo. Entonces, soy feliz aquí y vamos a ver qué pasa en los meses que vienen", afirmó tras el último partido ante el FC Barcelona. Una declaración de intenciones que ha ido mas allá, rechazando otras ofertas (se ha hablado del Bolonia, el Udinese y de clubes franceses y alemanes) para esperar al Sevilla FC.
Ese factor ha sido clave, pues el medicentro galo le ha dejado claro al Inter de Milán que no quiere ir a otro sitio. Pero, pese a contar con un acuerdo cerrado desde hace días con el propio Agoumé, el club hispalense tendrá que rascarse el bolsillo para hacerse con sus servicios, confiando en que sea un jugador importante y que pueda revalorizarse a sus 22 años. No se llegará, eso sí, a los 8 millones de euros en los que se pactó el pasado enero una opción de compra tachada de "poco realista" por Víctor Orta, aunque bajo la nueva fórmula, la operación sería valorada en realidad en 10 kilos.
Según el periodista Gianluca Di Marzio, se liman los últimos detalles para alcanzar un trato que rondará los 5 millones de euros por el 50% del pase, reservándose la entidad italiana la otra mitad de cara a una futura venta. Esas son las cifras sobre las que se trabaja en busca de un entente que realmente se da por hecho a falta de flecos.