Sergio Ramos volverá a enfundarse la elástica del Sevilla 18 años después de que saliera con destino al Real Madrid, viendo cumplido así su sueño de volver a su casa y quitarse la espinita tras salir en una convulsa operación en la que se filtraron muchas informaciones interesadas que, por lo general, no dejaron del todo bien al jugador ante la afición. Una operación que se acabará de cerrar este mismo lunes, una vez que Sergio Ramos pase el pertinente reconocimiento médico (estaba previsto que lo pasara en Madrid a primera hora de la mañana, aunque finalmente lo hará en la capital hispalense) y haya arribado a Sevilla en avión privado en torno a las 12:30 horas.
Luego, el internacional español se desplazará hasta las oficinas del Sevilla FC para acabar de cerrar un acuerdo que, en principio, se firmará por una temporada más otra opcional, a razón de algo más de un millón de euros netos para el jugador.
El propio Sergio Ramos atendió a los medios de comunicación desplazados en una pequeña rueda de prensa improvisada en la que se mostró "contento" por volver a casa tras haber estado esperando "unos mesecitos" que el acuerdo pudiera fructificar. Al mismo tiempo emplazó a todos a la rueda de prensa oficial, al tiempo que pidió disculpas por la espera, pues estaba prevista su llegada en torno a una hora antes. Una puesta en escena ante la prensa en la que también dejó una de las declaraciones más jugosas, dejando claro por qué ha apostado tan fuerte por el Sevilla, dejando a un lado los millones de Arabia Saudí: "Era una deuda con mi padre, con mi abuelo, con el sevillismo y con Puerta"
La operación se aceleró en las últimas horas, ya con el mercado cerrado y con Sergio Ramos como agente libre y negociando su marcha al fútbol de Arabia Saudí, donde el Al-Ittihad le ofrecía un contrato a razón de 20 millones de euros por temporada. Una llamada del vicepresidente Del Nido Carrasco ha acabad desbloqueando una operación que el Sevilla FC, tanto en boca del propio Del Nido Carrasco, como de su presidente José Castro y del director deportivo Víctor Orta, se ha encargado de negar durante todo el verano, habiéndose visto obligados, finalmente, a comerse sus palabras ante los malos resultados de este inicio de curso y la fragilidad defensiva demostrada por los de Nervión.
El fuerte interés por volver de Sergio Ramos, quien se ha llevado todo el verano tratando de mover los hilos necesarios para forzarlo y de ofrecerse en primera persona al propio Mendilibar ha sido suficiente para que el Sevilla FC haya acabado cayendo en su fichaje, el que a buen seguro apuntalará la retaguardia nervionense.
El principal inconveniente ahora es resolver cómo se liman las asperezas entre Sergio Ramos y una parte de la grada, con la que el camero ha estado enfrentado a lo largo de estos años siempre que ha venido a jugar al Sánchez-Pizjuán con el Real Madrid. Un Gol Norte al que, incluso, mandó a callar en una ocasión, propiciando el cierre parcial de esa zona.
De discurrir todo bajo la lógica aparente, mañana martes será la presentación de Sergio Ramos como sevillista. Momento en el que los rectores nervionenses acompañarán al camero en su puesta de largo y, a buen seguro, atenderán a todas estas cuestiones abiertas con el retorno de Ramos a un Sánchez-Pizjuán al que siempre ha querido volver.