El Sevilla FC estudia la incorporación a su disciplina del central esloveno Vanja Drkusic, de 24 años, que viene de marcarse una notable Eurocopa 2024 con su selección. El seguimiento a su compatriota Timi Max Elsnik, un mediocentro de 26 del agrado también de Víctor Orta, convenció al alto ejecutivo madrileño a la hora de preguntar por el zaguero, que termina el 30 de junio de 2025 su vinculación con Sochi, conjunto que milita en la Segunda división de Rusia. De hecho, sus propios dirigentes han desvelado el interés nervionense en el de Novo Mesto, aunque, en palabras de su director general, Dmitri Rubashko, recogidas por 'Sport24', las gestiones se encuentran todavía en una fase incipiente: "Realmente existe, pero no puedo decir mucho más por ahora".
Medios del país especulan con una solicitud de siete millones de euros por Drkusic, una cantidad muy lejos de las posibilidades blanquirrojas, aunque en la planta noble del Ramón Sánchez-Pizjuán entienden que se trataría de una postura de fuerza difícilmente sostenible al ser la última ventana en la que conseguir réditos por un defensor que apenas les costó 120.000 euros sacar hace dos años y medio del modesto NK Bravo. Además, la web especializada 'Transfermarkt' lo tasa en la mitad, al tiempo que el principal mercado que tiene el internacional esloveno, la Bundesliga, está vetado por las autoridades deportivas germanas por el boicot al país gobernado por Vladimir Putin debido a la invasión de Ucrania, un conflicto bélico que, incluso, juega a favor de los intereses del Sevilla FC de ser necesaria alguna medida extra de presión.
Y es que, mientras dure la complicada situación, la Fifa habría otorgado a los futbolistas un permiso extraordinario por motivos morales o de seguridad para abandonar el país, sin que el dueño de sus derechos pueda negarse mientras no sea oneroso para sus arcas, si bien es cierto que clubes como el Shakhtar Donetsk, en este caso ucraniano, habría denunciado al máximo organismo del fútbol mundial por el agravio que supuso la obligación de ceder a Vitao al Internacional de Porto Alegre, perdiendo la oportunidad de amortizar con un traspaso los cuatro kilos que pagó en 2019 al Palmeiras por el también central. Por todo lo anterior, se supone que Sochi y Sevilla llegarán a un entendimiento de afianzarse el interés por Drkusic, un zaguero agresivo, dominador del juego aéreo y aún joven, por lo que tendría recorrido para generar en el futuro una posible plusvalía.
Una vez confirmadas las salidas de Sergio Ramos (acababa contrato este 30 de junio de 2024) y Federico Gattoni (cedido al River Plate), quedan por definirse los futuros de otros centrales. Los fijos son Kike Salas, Loïc Badé (que disputará los Juegos Olímpicos y se incorporará el último al trabajo, ya iniciada LaLiga previsiblemente) y, contra pronóstico, Tanguy Nianzou, a quien García Pimienta tiene bastante fe. La polivalencia de Nemanja Gudelj y hasta de José Ángel Carmona cubriría el otro hueco, en el caso del serbio con el camino cerrado en la medular con la llegada de Sambi Lokonga y Saúl Ñíguez en principio, pero los rectores blanquirrojos, que no cuentan con Marcao Teixeira, peinan el mercado contando con el escenario de una salida bajo cualquier fórmula del brasileño.