El Sevilla FC tendrá apenas dos entrenamientos para recuperarse y preparar otro partido no menos trascendental este próximo sábado ante el Athletic Club. Ya sería poco tiempo, incluso, si no se hubiera producido la destitución de Lopetegui, pues no habrán pasado ni 72 horas desde que acabara el duelo de Champions y habrá muy pocas jornadas de trabajo, pero si a eso añadimos que hay un técnico nuevo...
Aunque ya ha hablado esta tarde, Lopetegui se despedirá del sevillismo por la mañana (12:00 horas) en el Ramón Sánchez-Pizjuán y acompañado de la Europa League que ganó en 2020. Y la idea es que el equipo se entrene por la tarde, a ser posible, bajo las órdenes del nuevo entrenador.
Aunque no es oficial, ya es de dominio público que Jorge Sampaoli será el que ocupe el banquillo sevillista a partir del próximo sábado. Una vez oficializada la salida de Lopetegui, su fichaje debería serlo también mañana mismo, antes de que aterrizase en la capital hispalense. Un hecho que, según ha desvelado Movistar, podría suceder a mediodía, pues el exseleccionador argentino está ya viajando camino de Sevilla desde Brasil y llegaría tras pasar por Portugal.
En ese caso, podría estar presente en el entreno vespertino, que empezará a las 18:30 horas, en el que conocería a sus jugadores y empezaría ya a trabajar de cara al encuentro del próximo sábado; un duelo ante el Athletic, que viene lanzado y que, como el choque ante el Dortmund, es clave para el futuro del equipo.
El preparador argentino, que también dará a conocer a su cuerpo técnico -se habla de que podría entrar Nico Pareja-, se enfrenta a un reto más duro, si cabe que el que vivió en la 16/17. Entonces cogió a un equipo campeón y, aunque no ganó ningún título, lo llevó al cuarto puesto de LaLiga y a octavos de la Champions League. Y peleó por el campeonato hasta que, en los tres últimos meses, se vino abajo.
Sampaoli, pese a que se marchó cuando tenía contrato en vigor para dirigir a la selección de Argentina, dejó muy buen sabor de boca entre los aficionados sevillistas. Su equipo jugaba al ataque y los partidos eran divertidos para el espectador. Ahora tiene mimbres para repetir la experiencia, pero antes tendrá que levantar el ánimo de un conjunto muy tocado y que le espera un calendario durísimo antes del parón mundialista.