Antonio José Medina3 min lecturaEl Sevilla viajará el lunes a Vitoria para enfrentarse en Mendizorroza al Alavés, un club con el que ha estado negociando últimamente la cesión de Óscar Rodríguez y que, finalmente no ha llegado a ningún acuerdo. Y lo hará sin su central titular. Pese a que las imágenes demostraban que Hugo Duro se tiró y que la cartulina roja que vio Loïc Badé era exagerada, el comité de Competición de la RFEF sancionó al jugador con un partido y, ahora, el Comité de Apelación ha ratificado la suspensión.
Según escribió Sánchez Martínez en el acta arbitral, Badé fue expulsado "sujetar a un adversario en la disputa del balón, derribándole, impidiendo con ello una ocasión manifiesta de gol". Como el francés toca levemente al delantero del Valencia y éste, cuando siente el contacto, se deja caer, tanto Competición como Apelación no ven motivos para retirarle la amarilla y no contradicen lo escrito por el colegiado murciano.
En este sentido, según publica este último comité disciplinario de la RFEF, en el video aportado por el Sevilla "no es posible apreciar un error material manifiesto, capaz de desvirtuar la presunción de veracidad del acta arbitral dado que las imágenes son, en todo caso, compatibles con lo reflejado en el acta. Consideran que lo que se aprecia en las imágenes es perfectamente compatible con los hechos recogidos en el acta, por mucho que también pueda serlo con otras posibilidades".
Y reiteran que la "interpretación esgrimida por el Sevilla "resulta insuficiente para desvirtuar lo consignado en el acta arbitral, no resultando por tanto posible apreciar el error material manifiesto pretendido por el Club recurrente".
El Sevilla tiene ahora quince días para recurrir ante el TAD, pero difícilmente éste podrá contradecir lo que ha dicho los dos comités de la Federación Española. Aunque si lo hace, siempre podría pedir la cautelar y contar con Loïc Badé ante el Alavés, en un momento en el que Marcao acaba de salir de una lesión y Nianzou es baja.
Ante esto, las opciones que le quedan son Gudelj y Gattoni, y un Kike Salas que, en principio, iba a salir cedido, pero finalmente se ha quedado al menos hasta que se juegue este partido, por si tiene que suplir a Badé. No obstante, no se descarta que, incluso, pueda quedarse más allá del 31 de agosto. A Mendilibar le gusta mucho y en pretemporada ha sido de los mejores en su puesto.