La semana pasada fue muy ajetreada en el Sevilla FC por la explosión del 'caso Kike Salas'. El canterano nervionense está siendo investigado en el marco de un posible caso de apuestas deportivas fraudulentas y hubo mucho ruido mediático en torno al '4' después de que la Policía Nacional se personase en la ciudad deportiva para llevarle a comisaría para tomarle declaración. LaLiga se apresuró a anunciar que se presentará como acusación particular, todo lo contrario que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), donde han optado por seguir una línea mucho más cauta respetando la presunción de inocencia. El presidente de la RFEF, Rafael Louzán, ya exponía hace unos días que necesitará mucha más información para posicionarse en este tema y este mismo miércoles se ha conocido que el máximo organismo del fútbol nacional ha decidido archivar el caso a la espera de que el juzgado esclarezca los hechos.
Así lo anuncia una información publicada en Mundo Deportivo por el periodista 'freelance' Ramón Fuentes, conocido por manejar buenas fuentes a nivel federativo, quien asegura que la RFEF ha dado carpetazo definitivo al asunto a la espera de que concluya un proceso judicial que aún ni siquiera ha arrancado -el 'caso Kike Salas' está aún en fase policial-. La misma pieza recuerda que la denuncia interpuesta acusa al futbolista del Sevilla FC de participar en una posible estafa, por los beneficios económicos que personas de su entorno se habrían embolsado (alrededor de 10.000 euros) apostando a las siete amarillas que el defensor vio en los últimos nueve encuentros de la pasada 23/24.
Así, además de recalcar que el caso podría juzgarse por la vía penal -con castigos que pueden ir entre dos meses y tres años de cárcel-, explica que las penas federativas a las que se expondría Kike Salas podrían llegar hasta los cinco años de suspensión de la licencia federativa. Así, cita el el artículo 78 del reglamento, en su apartado relativo a la participación en juegos y apuestas: "La participación de futbolistas, entrenadores/as, directivos/as, árbitros/as y de en general las personas que forman parte de la organización federativa en apuestas y/o juegos que gocen de un contenido económico y éstos tengan una relación directa o indirecta con el partido en cuestión, será considerada como infracción de carácter muy grave y se impondrá, además de la sanción de multa de 3.006 a 30.051 euros, una o varias de las siguientes sanciones".
"Asismismo, acarrearía una inhabilitación para ocupar cargos en la organización federativa, o suspensión o privación de licencia, por tiempo de dos a cinco años. En caso de reincidencia, además, se sancionaría con privación de licencia, con carácter definitivo. Tal clase de sanción sólo podrá imponerse de modo excepcional por la reincidencia en infracciones muy graves, medidas que sólo podrían aplicarse siempre que el jugador sea finalmente acusado de este delito de apuestas por la va penal", añade la ley.
El recién elegido máximo dirigente de la RFEF estuvo el miércoles pasado en Valencia y desde allí ya se mostró bastante más prudente que LaLiga que comanda su nuevo vicepresidente, Javier Tebas. Louzán pidió tiempo para que avance la investigación y evitó realizar un pronunciamiento oficial "a la espera de tener una información más concreta" sobre el 'Caso Kike Salas'. Sí dejó claro que, si fuese demostrado que el jugador del Sevilla FC incurrió en una ilegalidad de la que todos los futbolistas son debidamente informados, el organismo federativo "tomará alguna decisión, seguro". No obstante, no moverá ficha hasta que haya sentencia firme al respecto. El mismo proceder ha seguido el Sevilla FC, que sigue contando con total normalidad con un futbolista convencido de su inocencia y que, además, este apunta al once de García Pimienta el sábado ante el RCD Espanyol debido a la baja de Adrià Pedrosa.