La 'operación salida' se erige en una prioridad en Nervión y en las últimas semanas se ha dado un paso al frente con las despedidas de Thomas Delaney, que se ha marchado al Copenhague, o, sobre todo, de Adnan Januzaj, cedido a Las Palmas hasta final de temporada, lo que supone un ahorro del 40% de la ficha del belga. Sin embargo, todavía queda mucho trabajo por hacer en este apartado, pues queda por encontrar acomodo a futbolistas que no cuentan, como Joan Jordán, Dmitrovic, Marcao (otra vez lesionado), Óscar Rodríguez o Augustinsson.
En este sentido, hay varias salidas que se encuentran enconadas por su elevado sueldo y la negativa del futbolista a renunciar a un solo euro de su contrato, pero una de ellas se encontraría ya en su recta final debido a que se han intensificado los movimientos en las últimas horas. Se trata del lateral sueco, que cada vez está más cerca de regresar al Anderlecht, club en el que militó el pasado curso con muy buen rendimiento y en el que le gustaría repetir.
De este asunto se habla desde antes de que acabara la temporada, por la disposición de todas las partes a que esta operación se llevara a cabo, pero, como ocurrió con Delaney, el sueldo del jugador se ha interpuesto como un obstáculo difícimente salvable.
No obstante, el Anderlecht no se ha rendido y ha insistido en su fichaje, hasta el punto de que las conversaciones con el carrilero han avanzado notablemente y ya tiene un contrato de tres años sobre la mesa. Así lo asegura el conocido periodista belga Sacha Tavolieri, que destaca que la operación está enfilada con el jugador para firmar a título definitivo tras su fructífero préstamo.
Claro que para esto se produzca antes es necesario que el Sevilla acuerde la salida del sueco, lo que posiblemente se producirá con una rescisión similar a la del danés. Un tema que en estos días negocia Víctor Orta con el representante del futbolista y que precisa que Augustinsson renuncie a parte de lo que le corresponde para dejarle salir libre y firme con el Anderlecht por una cantidad algo inferior a la percibida en Nervión, pero con tres temporadas por delante a sus 30 años.
Aún restan flecos por cortar, pero la insistencia del Anderlecht podría hacer posible próximamente que se desatasque una salida necesaria para seguir cuadrando cuentas en Nervión.