Óscar Murillo6 min lecturaAprovecha su extensa entrevista desde San Pedro del Pinatar con el diario 'Marca', donde está de mini pretemporada con el Hadjuk Split, para volver a disculparse con Jesús Navas: "Iba a estar en su despedida, pero él sabe que no pude acudir por un problema familiar que me surgió esa misma mañana. Le llamé, me entendió y quería darle las gracias. Me gustaría felicitar a todos los sevillistas que hemos sido capaces de disfrutar de Jesús. Si hay un jugador que lleva una parte del escudo es él, y es una pena que en tan poco tiempo nos hayamos ido tantos jugadores importantes". Porque, aunque no guarda rencor ni nada parecido, entiende Ivan Rakitic que al Sevilla FC le falta, quizás, veteranía y liderazgo: "Me encanta ver a jugadores jóvenes, pero yo soy de los que opinan que la 'vieja escuela' es importante. Por eso felicito a Florentino y al Madrid, por aguantar el ritmo con Luka Modric y, hasta hace poco, con Toni Kroos".
Y es que, en ciertos momentos, hay que poner orden: "Los jóvenes son muy buenos, pero la 'mano dura' la ponemos los que somos un poquito más viejos, y eso es importante. No es lo mismo, con todo el respeto, enfrentarte a Modric que a un jugador que está empezando. Es momento de apretar. Yo confió al 100% en el presidente, en Víctor Orta y en García Pimienta, pero entiendo que han sido muchos cambios en poco tiempo, y eso no es fácil. Es el momento de estar más unidos que nunca para volver a ver al equipo arriba, como siempre". Su adiós tuvo otros condicionantes, aunque algo similar le ocurrió a Ramos: "Es importante que haya gente de peso, con trayectoria importante, que los pueda guiar. Si las jerarquías no están claras pueden surgir problemas. No es algo que haya inventado yo, pero todos conocemos la situación actual, también en lo económico. Sergio, Jesús o yo mismo, los que queremos tanto al Sevilla FC, lo hubiéramos dado todo por continuar, pero, insisto, hay que unirse y confiar".
Recuerda el croata que tiene una 'espinita clavada' con Nervión: "No, no era mi idea (irse), pero a veces hay que entender los momentos. No conecté con el míster (Quique Sánchez Flores), y no era por jugar o no. Simplemente, lo que yo veía blanco él lo veía negro y viceversa. Yo estaba en mi casa, en el sitio más bonito del mundo, pero hay que establecer prioridades y, para mí, ésa será siempre el Sevilla FC. No existe nadie que pueda luchar contra el escudo. Yo no puedo pedir a un presidente que vaya en contra de un entrenador. Tuve que dar un paso al lado, y no pasa nada. ¿Retirada de blanquirrojo? Ésa era mi idea. Yo ya le dije al presidente que podía contar conmigo los años que hicieran falta (1, 2 o 5). Yo quería 'quemarme' por el Sevilla, pero a veces suceden cosas así. Fuimos de lo más bajo a lo más bonito con Mendilibar y me dio pena no poder sostenerlo en el tiempo, pero lo importante es el Sevilla FC, no Ivan Rakitic".
El mediapunta, que rompió una lanza a favor de Ansu Fati ("soy muy fan suyo y me da mucha pena que haya pasado por tantas lesiones; cuando estuve en el Sevilla y se fue al Brighton intentamos ficharle"), no descarta volver en un futuro al club de sus amores: "No lo sé, no depende de mí. Sevilla es mi casa. Yo no nací ni sevillano ni sevillista, pero moriré siéndolo, allá donde esté. A mis compañeros del Hajduk se lo digo, que lo sepan aquí y en Pekín, que no hay ciudad como Sevilla y, para mí, no hay mejor equipo. Yo estoy a disposición del Sevilla FC para lo que sea, para dar un consejo de amigo o para ocupar un puesto importante. No me importa. Para mí el Sevilla FC lo es todo y toda la vida va a ser así". Por si acaso, ya se prepara: "He hecho el curso de Dirección Deportiva con la UEFA, voy a empezar a sacarme el carnet de entrenador en Croacia, el próximo verano quiero ir a Harvard a sacarme la licencia de 'Sport Management', tengo mi propia empresa de marketing desde hace seis años...".