Seguramente, los 'dardos' de José María del Nido Benavente, enfrentado en los últimos años con el actual consejo del Sevilla FC, no han hecho sino refrendar la figura de Víctor Orta. Como se apuntaba en este mismo portal a principios de semana, el madrileño se ha visto en medio de un fuego cruzado entre el abogado y su hijo mayor, aunque su puesto no corre ningún peligro. Nunca estuvo cuestionado, en realidad, pese a que, de puertas para adentro, se le haya afeado su empeño en traer a Diego Alonso como sustituto de José Luis Mendilibar. Pero, en contra de lo que le ocurrió a su predecesor, Monchi, con Jorge Sampaoli, ni mucho menos su relevo favorito para Julen Lopetegui, el actual director deportivo tendrá voz y un voto de calidad en la elección del sustituto de Quique Sánchez Flores, que no cumplirá, salvo giro mayúsculo de los acontecimientos, el contrato firmado hasta 2025 en Nervión.
Si con el ex preparador del Getafe CF hay consenso en la planta noble del Ramón Sánchez-Pizjuán, también existe sobre la continuidad de Orta, pese a que en los mentideros futbolísticos han salido a colación en los últimos días nombres como los del ex del Real Betis Sergio Fernández, actual jefe de la planificación del Deportivo Alavés, así como David Cobeño, ex portero blanquirrojo que ya fue sondeado a principios del verano de 2023, aunque entonces fue retenido por el Rayo Vallecano. Lejos de someter a debate su futuro, Del Nido Carrasco y José Castro han transmitido en varias ocasiones al otrora responsable del Leeds United que la confianza y el crédito siguen intactos. A su favor, la reducción considerable de la masa salarial en las pasadas ventanas y el esfuerzo por fichar jóvenes revalorizables, más allá de que el técnico no haya considerado oportuno darles minutos.
La encomienda ahora es mucho más importante, ya que Orta tendrá que gestionar la renovación o el adiós de dos capitanes, canteranos y 'pesos pesados' como Sergio Ramos y Jesús Navas, aparte de lograr adelgazar todavía más una nómina que, incluso con el crédito de 108 millones de euros, necesita de 2-3 grandes ventas, si es posible con plusvalía (todas las miradas están en Juanlu Sánchez y, sobre todo, Isaac Romero), más quitarse de encima emolumentos fuera de mercado ya como los de Suso Fernández, Adnan Januzaj o Rafa Mir, especialmente por la contraprestación en forma de aportación que han reportado los futbolistas, especialmente los dos últimos.