La primera oferta por Delaney

La salida de Thomas Delaney del Sevilla FC está viviendo nuevos capítulos que hacen pensar que, si bien no fraguó a finales de la ventana estival (cuando se habló de clubes de la Bundesliga sobre todo), sí podría producirse en enero. Y con un regreso a casa seis años después. Porque fue ese mes de 2017 cuando el mediocentro abandonaba el Copenhague para firmar por el Werder Bremen a cambio de dos millones de euros, que los blanquiverdes amortizaron notoriamente al traspasarlo temporada y media después al Borussia Dortmund por 10 veces más. De allí aterrizó en Nervión hace dos veranos por unos seis, aunque el internacional danés entiende que no va a contar mucho para Jorge Sampaoli y, como ya se avanzaba en estas líneas, desea poner rumbo a otro rival blanquirrojo en el Grupo G de la Champions.

Como apunta el querido compañero José Gavilán en su canal de Twitch, los contactos entre Delaney y la institución en la que se formó se han intensificado después de la visita a la capital nórdica el pasado 14 de septiembre, cuando aprovechó para dialogar con el director deportivo de los albiazules, Peter Christiansen. El centrocampista ha aceptado bajarse el sueldo para entrar dentro de los parámetros del Copenhague, que ha sufrido recientemente la grave lesión de su homólogo Zeca, por lo que sólo falta que se alcance un acuerdo entre las entidades. Para muchos, su reciente adquisición de una mansión de 291 metros cuadrados en su localidad natal de Frederiksberg por 26 millones de coronas danesas (unos 3,5 millones de euros) sería una prueba de sus planes, aunque Delaney es internacional y vuelve cada poco a su tierra para participar en encuentros con la selección.

Despedido con honores de Dortmund también, se sintió aún más extraño en el Parken Stadion. "Cuando el estadio me canta así, lo siento y lo agradezco. Me siento honrado por eso. Fue una gran experiencia. Traté de dejarlo de lado en el partido. Fue extraño ser el oponente, pero creo que salió bien", explicaba el propio mediocentro después de la comparecencia en Copenhague con el Sevilla, cuyo director general deportivo, Monchi, apunta el mismo Gavilán en exclusiva, no ve con malos ojos hacer caja con esta venta y el correspondiente ahora de salario, que podría ayudar a satisfacer ciertas necesidades de Jorge Sampaoli en el mercado invernal, pero, como ya dejó claro en verano, no está dispuesto a regalarlo. El cálculo de la amortización estaría entre los tres y los cuatro millones de euros, siendo la primera la cantidad a la que llegarían en su oferta inicial los 'leones'.