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"Es verdad que al principio era una temporada bonita, con diferentes objetivos como la Champions. Al final, no ha salido como queríamos, por lo que a pensar ya en la siguiente, en la que este escudo se merece mucho más. La ilusión que se tenía se ha ido cayendo un poco por las circunstancias de las derrotas. Ha sido un año bastante de 'montaña rusa'. Ha habido muchos cambios de entrenadores, que se dan, claro, porque internamente, como equipo, no se han hecho bien. Al menos, queríamos acabar con una alegría para la afición, pero no ha podido ser. No hemos hecho un mal partido; hemos tenido nuestras ocasiones, pero la pena ha sido que no han entrado. El Barça es un equipo que tiene mucho la posesión, aunque hemos tenido nuestras opciones a la contra", resumía en zona mixta un Adrià Pedrosa que adelantó un poco lo que viene en Nervión.
"Creo que el equipo va a cambiar bastante, porque hay muchos cedidos y tal. El año que viene hay que cambiar esto, porque este escudo no se lo merece". En este sentido, entendía las protestas de la grada: "La afición está un poco enrabietada y es normal, porque no hemos estado a la altura. Le agradecemos que siempre haya estado con nosotros. Vamos a luchar, yo al menos, por darlo todo el año que viene. La gente de fuera decía que las aficiones del sur son un poquito locas y yo sólo tengo palabras bonitas. Lo que he vivido este año, por el ambiente que hay aquí, no lo he vivido en ningún lado". Además, cree que Quique Sánchez Flores se marcha por la puerta grande: "El míster ha hecho el trabajo que le habían pedido y es una pena que se tenga que ir; le agradecemos también su esfuerzo y su ayuda para conseguir el objetivo".
A nivel individual, el lateral izquierdo está ansioso por vivir una campaña tranquila y con opciones de luchar por títulos y no por quedarse con cierta holgura en Primera división: "El año pasado vine de una situación muy mala en el RCD Espanyol con el descenso. He jugado mucho más de lo que pensaba. Personalmente, estoy jodido por el equipo, pero, por otra parte, me pasé un año parado y no puedo estar súper mal y decaído, porque he jugado treinta y pico partidos. Ahora sólo espero que los objetivos que se marquen, que son grandes porque somos el Sevilla FC, se cumplan".