Óscar Murillo4 min lecturaSi ya la goleada fue un castigo importante para el Sevilla FC en Montjuic, pues los de García Pimienta se habían marchado al parón de selecciones con siete puntos de nueve posibles, la visita al FC Barcelona no trajo sino malas noticias para los blanquirrojas. Quizás la única buena fuera el estreno como goleador de Stanis Idumbo Muzambo, que presenta sus credenciales en un momento idóneo, puesto que cayeron lesionados consecutivamente (y en orden de gravedad) Chidera Ejuke, Suso Fernández y Adrià Pedrosa. Lo del lateral zurdo parece algo anecdótico, una subida de gemelos por el sobresfuerzo de marcar a Lamine Yamal, al tiempo que el míster nervionense confiaba en que el gaditano, "que es más veterano y conoce mejor su cuerpo", hubiese parado a tiempo y evitado una dolencia más grave. Con el nigeriano no tenía ninguna duda, por lo que se limitaba a cruzar los dedos y esperar.
Este lunes, los dos atacantes se sometían a una revisión médica para determinar el alcance de sus problemas físicos y poder establecer de cuánto será su baja. A falta de comprobar la evolución en los próximos días, hay fundadas esperanzas de que Pedrosa pueda estar disponible el viernes para enfrentarse a su ex equipo, donde se formó, ya que participó con aparente normalidad en la sesión de descarga dispuesta por su paisano en la Carretera de Utrera. Con todo, está claro que, aunque el ex milanista pudiera calcar la suerte de Loïc Badé en sus dos contratiempos con la selección francesa durante los primeros parones del curso, ninguno de los cuales le supuso una ausencia de sus funciones en tierras hispalenses, las opciones de que Saúl Ñíguez, al que le queda un mes largo de convalecencia, fuera el único ocupante de la enfermería eran remotas.
Pasadas las nueve de la noche, el Sevilla FC hacía oficiales ambos partes médicos oficiales, que confirmaron los peores pronósticos. De esta manera, Ejuke sufre una lesión de alto grado en los isquiotibiales del muslo izquierdo, mientras que Suso padece una lesión de bajo grado en el aductor largo de la misma pierna. El africano estará fuera de los terrenos de juego un mínimo de dos meses (o hasta cuatro si pasa por el quirófano), pues su caso es similar al del ilicitano, por lo que no regresará antes de Navidades, si bien, teniendo en cuenta que este año LaLiga para desde el 23 de diciembre al segundo fin de semana de enero, es bastante probable que no reaparezca el nigeriano hasta comienzos de 2025, acaso entre medias en Copa del Rey. Por su parte, el gaditano estará K.O. un par de semanas y se perderá seguro lo que queda de octubre. Estaría listo a primeros del mes que viene, con la posibilidad de aguardar si fuera necesario a la vuelta del próximo 'impasse' de selecciones (del 11 al 22-N) para no arriesgar.
