Ni que decir tiene que en Roma la figura de Monchi no ha dejado un buen recuerdo. El director deportivo del Sevilla Fútbol Club no llegó a cumplir los dos años en el cargo en la capital de Italia, donde su gestión sigue siendo recordada para mal pese a que con él en la dirección deportiva llevó al equipo a una semifinal de la Champions League. Pero en el cómputo global, para los aficionados 'giallorossi' pesa más lo negativo que lo positiva en la balanza.
Pocos recuerdan que en su breve etapa en Roma dejó un beneficio económico en traspasos de 65,22 millones de euros y una revalorización de mercado de la plantilla del 35,7% y más bien lo señalan por fichajes como los de Cengiz Under, Robin Olsen, Justin Kluivert, Javier Pastore o Steven Nzonzi y ventas como las de Alisson Becker, por 62,5 millones de euros al Liverpool, Antonio Rudiger, Leandro Paredes, Mohamed Salah o Radja Nainggolan, por 38 millones de euros al Inter de Milán.
Y ha sido precisamente este último, el centrocampista belga, que durante su carrera deportiva ha intercalado grandes actuaciones dentro del campo como polémicas fuera del mismo, la última siendo pillado fumando en el propio banquillo de su equipo, el Royal Antwerp, lo que le ha costado el ser apartado de la plantilla de forma indefinida, el que ha vuelto a acordarse del que fuera su director deportivo en Roma, Monchi, como tantas veces ha hecho en los últimos años.
En una entrevista para el portal Tradición Romanista, el belga ha recordado su etapa en el conjunto 'giallorossi' y no ha dudado en señalar al culpable de su salida. "Vino de director deportivo el otro (Monchi) que arruinó al equipo. Vendió a todos los jugadores. Ni siquiera puedo nombrarlo. Si hubiera sabido que se iría poco después, me habría quedado. Si volviera a Roma ahora, podría arruinar un recuerdo maravilloso que tengo", ha recordado Nainggolan.
Además, el centrocampista criticó también las ventas durante la etapa del de San Fernando en Roma: "Teníamos jugadores muy fuertes y luego los vendimos. Estas cosas sucedieron todos los años por el presupuesto. Si quieres ganar jugadores fuertes, tienes que mantenerlos. Si siempre cambias, nunca tendrá una estructura básica sólida".
Sobre su futuro, Nainggolan ha sido claro: "Todavía no pienso en retirarme. Pero creo que nunca es fácil. Todo jugador quiere terminar de buena manera. Tarde o temprano la despedida llega a todos los jugadores. Todavía no he pensado en irme, pero no tengo miedo de hacerlo algún día".