Aunque pueda extrañar el mercado invernal del Aston Villa, que pujó sin suerte por el central sevillista Loïc Badé y el futuro portero bético Álvaro Valles, reclutando a los zagueros Andrés García y Axel Disasi, así como al extremo Donyell Malen y a dos atacantes conocidos pero venidos a menos como Marcus Rashford y Marco Asensio, los que conocen a Monchi entienden que no siempre se puede descubrir talento oculto, porque hay a menudo "situaciones de exigencia a corto plazo. Han buscado ese rendimiento con jugadores contrastados que buscaban un sitio donde reivindicarse". Algunos creen, por ejemplo, que no son fichajes propios del isleño, en parte porque no tiene todas las riendas, como sí en la AS Roma o en el Sevilla FC. "Allí trabaja en un triunvirato con Unai Emery y Damià Vidagany", mientras que en Nervión "siempre llevaba las negociaciones. Otra cosa es cuando se profundiza en temas específicos o la redacción del contrato y los pormenores, que es una parte más técnica".
Quien lo radiografía es Miguel Ángel Gómez, uno de sus más estrechos colaboradores en el club blanquirrojo entre 2010 y 2017 (aunque ya ejercía desde 1999 como psicólogo, pasando en 2005 a realizar informes sobre rivales para Juande Ramos y, aparte de dirigir en la cantera, puso pronto su criterio y ojo avizor al servicio de la secretaría técnica). El ahora director deportivo del CD Eldense analizaba para 'Relevo' cómo es la estrategia de Ramón Rodríguez Verdejo a la hora de reclutar futbolistas, haciendo hincapié en su amplio poder de persuasión: "Es muy bueno a la hora de convencer a los jugadores cuando tienen otras opciones. Monta una oferta atractiva aunque esté en inferioridad de condiciones de lo que puedes ofrecer. Es muy creativo para diseñar y estructurar la oferta, para que el futbolista se sienta valorado. No sólo es el fijo del salario, sino muchos de los objetivos que se ponen, por ejemplo". Ingeniería financiera, que le llaman.
El de Hinojosa del Duque añade otro elemento que compone el 'modus operandi' de Monchi a la hora de seleccionar objetivos y eliminar competencia: "En el aspecto afectivo, intenta ganarse al jugador. Mientras trabaja el fichaje y después, cuando lo ficha. Durante el mercado de transferencias hay mucha tensión en las últimas dos semanas. Es un ganador, quiere al primer jugador que tiene en la lista". Desde luego, el de San Fernando es un coleccionista de plusvalías, como ha demostrado, por ejemplo, sacando más de lo que costaron por dos de sus apuestas primeras, Moussa Diaby (de 55 millones de euros a 60) o Jaden Philogene (de 16 a 23,7), pero también con otros que ya estaban cuando aterrizó, como Jhon Durán (abonaron sus antecesores por él 29,5 y han recaudado 77 más bonus). Además de contratar del Levante UD al lateral Andrés García, que querían Real Betis y Sevilla FC, sacó a la Juventus por Douglas Luiz no sólo casi 13 millones de superávit, sino a Samuel Iling-Junior y Enzo Barrenechea.