El mensaje de Nianzou, una 'roca' con ganas de revancha

Tras un primer año muy duro, el joven central francés ha contratado a un entrenador personal durante sus vacaciones y lleva a cabo una intensa puesta a punto para volver al cien por cien; ajeno a los rumores de salida y centrado sólo en convencer a Mendilibar para triunfar en el Sevilla

El mensaje de Nianzou, una 'roca' con ganas de revancha
Nianzou presume de musculatura tras sus intensos entrenamientos durante sus vacaciones. - @t.nianzou
Aitor TorviscoAitor Torvisco 6 min lectura

"Mejor rematador que defensor. Un peligro en el área del rival, pero también en la propia". Así se podría resumir el primer año de Tanguy Nianzou como futbolista del Sevilla FC, un curso con más sombras que luces en el que ha aportado tres goles y ha costado alguno que otro más por sus errores como último hombre. Para colmo, el central francés tuvo que parar por una lesión muscular cuando más confianza transmitía y se perdió el tramo final, el más ilusionante de una convulsa temporada también en lo colectivo. Además, su irregular rendimiento y esos citados problemas físicos le han dejado fuera del Europeo pese a que era un fijo en la selección francesa sub 21. Sentenciado para los más críticos, con los más optimistas confiando en su extrema juventud (21 años) y en su glamuroso currículum (PSG y Bayern Múnich), se ha especulado con una posible venta este verano, pero el futbolista parisino ha contestado a todos esos rumores con un mensaje contundente a base de imágenes que valen más que mil palabras.

Nianzou tiene ganas de revancha. "Dicen que nunca nos rendimos. ¡Ahora entiendo el significado de todo esto! Gracias, Sevilla FC", decía el francés en sus redes sociales justo después de ganar la UEFA Europa League en toda una declaración de intenciones tras el brillante broche de un año de crecimiento en todos los sentidos. Especialmente en lo anímico, pues las críticas siempre afectan, pero también en lo deportivo, adaptándose a varios estilos de juego y sistemas; reponiéndose de la falta de confianza que le transmitía Julen Lopetegui, que le quería lo más lejos posible del área propia y le probó de pivote, o de los excesivos riesgos que Jorge Sampaoli le forzaba a asumir en la salida jugada desde muy atrás.

Siente que el ordenado pragmatismo de José Luis Mendilibar, con quien apenas ha podido coincidir por culpa de esa lesión muscular que le tuvo parado toda la recta final de curso, le viene muy bien a sus características y se está esforzando al máximo durante sus vacaciones para volver hecho un toro, con el firme objetivo de aprovechar la pretemporada para convencer al vasco de que merece un sitio de titular en el eje de la zaga junto a su compatriota y amigo Loïc Badé. Así, se ha buscado un entrenador personal, el preparador físico Raphael Pallanca, y ha compartido en sus redes sociales imágenes de un agotadora sesión exhibiendo musculatura tonificada y no necesitando más expresión que el emoticono de una roca.

Hace dos semanas, la Gazzetta dello Sport informaba de un fuerte interés del AC Milan e incluso aseguraba que los 'rossoneri' tratarían de convencer al Sevilla FC con una propuesta a la baja de 10 millones de euros (costó 16 kilos el verano pasado y tiene contrato hasta 2027). La información surgía en medio del deseo de volver a Nervión filtrado por Sergio Ramos y apuntaba al posible 'overbooking' de centrales, tras la opción de compra ejercida por Badé, el fichaje de Federico Gattoni, la renovación del polivalente Nemanja Gudelj, la ausencia de noticias por el momento acerca de una posible salida de Karim Rekik, la teórica continuidad de Marcao Teixeira o el regreso del cedido José Ángel Carmona (ya que Kike Salas negocia su continuidad en el CD Tenerife).

No obstante, además de que nunca llegó al Sánchez-Pizjuán esa supuesta oferta -ni ninguna otra-, el deseo de Nianzou es tomarse la revancha y revertir su situación en el Sevilla FC. En eso trabaja, siendo consciente de que tanto él como todos sus compañeros están en el mercado y pueden ser traspasados si llega una propuesta interesante.

Y es que, a pesar de acusar el período de adaptación y los constantes cambios en el banquillo sevillista; a pesar de las críticas por no rendir a su mejor nivel y a pesar de sufrir dos lesiones musculares (a principios y al final de la 22/23), el galo hace un balance positivo de esta primera temporada en Nervión, que ha terminado con 30 partidos disputados entre todas las competiciones y un total de 2.259 minutos. Por comparar, en sus dos años en el Bayern de Múnich sólo sumó 28 encuentros (1 gol) y en su único curso en el primer equipo del PSG tras dar el salto desde su filial acumuló 13 (con tres tantos).