Esclarecedora, como casi siempre, la rueda de prensa de José Luis Mendilibar, vespertina en esta ocasión. Al ser justo antes del último entrenamiento de la primera plantilla del Sevilla FC, no pudo asegurar los componentes de la lista, en la que "no es seguro" que figure Marcos Acuña, aunque "puede ser, porque lleva ya 2-3 entrenamientos completos con el grupo", al tiempo que descartaba a Óliver Torres, con una dolencia muscular que le impedirá "estar para Barcelona", aunque cree que "el sábado podrá volver a ejercitarse" con sus compañeros. Del resto, pocas incógnitas había, ya que Mariano, Nianzou y Marcao tienen el objetivo en próximas citas, la mayoría ya para después del 'impasse' de octubre. Tras el anterior llegó la reacción de los suyos: "Habiendo tanto partido, queremos meter más gente. Jugamos hace dos días y lo hacemos mañana, por lo que no hay tiempo de recuperar, pero tratamos de meter más gente no por darles un premio sin haber hecho nada, sino porque trabajan bien y se entrenan bien. Estamos en buena sintonía y dinámica. Desde el parón de septiembre, los resultados han sido mejores, no hemos encajado tantos goles... Eso nos beneficia en la clasificación, pero también por el bienestar del grupo".
Ahora, habrá que demostrar el despertar rompiendo un gafe en las visitas al Barcelona que dura desde 2002, aunque el de Zaldívar es moderadamente optimista: "Estamos mejor, lo que, sin duda, ayuda en cuestión de confianza. Del propio jugador en sí mismo y en el equipo. La idea que tenemos nosotros la sabe el rival y nosotros la suya. Es un equipo complicado, con muy buenos futbolistas, en su campo todavía más difícil. Están encajando más goles esta temporada, lo que nos da cierta esperanza, aunque para ganar creo que habrá que marcar más de uno. Ellos allí uno te van a hacer con todo lo que generan. Pero debemos ir con mentalidad positiva para ganar allí. Hemos ido allí otros años y lo normal, con equipos pequeños, era salir goleados. Ahora no es para tanto. De la época de Messi a ahora ha cambiado un poco en ese sentido, pero los buenos jugadores y el buen equipo los tienen. Si tienen un día bueno, te pueden endiñar, pero creo que podemos competir allí. Ya somos dos los que llevamos mucho sin ganar en Barcelona. El Sevilla y yo como entrenador. A lo mejor mañana a las once de la noche ya no es así. Hay que ser valientes, ser uno mismo y no pensar tanto en el rival, sino en lo que podemos hacer nosotros".
Cuestionado sobre el 'caso Negreira', de actualidad de nuevo, Mendilibar no cree "que afecte en nada" al partido. "A nosotros, por supuesto que no. A ellos, creo que tampoco. Están acostumbrados a estas cosas. Ese tema lo lleva un juez y no debemos meternos. Me imagino que no cambiará de sistema, aunque sí pueden cambiar jugadores ellos, como nosotros. Su idea de fútbol la tenemos clara. Sabemos que Yamal, individualmente, es muy bueno. Si juega y vas a por él, lo normal es que te deje sentado. Pero, si no juega él, juega Raphinha", explicaba el vasco, que no tenía muchas ganas de entrar en si ha visto cosas raras con los árbitros cuando se enfrentó al Barça: "Siempre que vas a un campo así, estás más metido en tu área que en la suya. Por probabilidad, es más fácil que te piten penalti en contra que a favor. Y es más fácil que los árbitros se equivoquen en tu área que en la suya". Sorna aparte, insistió en que es un asunto extradeportivo que no les compete: "No tengo ni idea de si hace daño al fútbol español. Está ahí y tendrán que solucionarlo en los juzgados".
No le preocupan las rotaciones, que ahora le están funcionando, ni se plantea un cambio de dibujo, aunque en el Eibar jugase con un 1-4-4-2: "Antes de ir allí, casi siempre ponía un 1-4-2-3-1, como ahora. En cualquier caso, en Ipurua salía así porque tenía los jugadores adecuados; siempre tratas de hacerlo de la manera más beneficiosa según la plantilla. Pero yo sólo dispongo ahora de dos delanteros. En cuanto a los cambios, cuando llegué también hubo una secuencia de partidos similar a la de ahora, hicimos muchos cambios creo recordar y los resultados fueron buenos. Hay otros entrenadores que apenas no cambian porque creen que es lo mejor. Yo creo que es mejor que algunos recuperen para otros partidos, aunque algunos tengan que repetir". Entre las novedades podría estar Sergio Ramos, suplente contra el Almería por decisión técnica: "Ya estaba físicamente bien para ser de la partida el martes. Lo está también para Barcelona. Lo del robo no afectó en mi decisión". Acerca de este episodio, aclaró: "Nos lo dijo enseguida lo que había pasado, al día siguiente. Es una pena que pasen estas cosas siempre. Hay gente que necesita o le da igual hacer el mal. Me imagino que le afectaría, aunque no entró en detalles".
Sí se molestó un poco al referirle que un periodista había cuestionado a Xavi en la rueda de prensa sobre si temía por la integridad de sus delanteros con el camero sobre el campo, a lo que 'Mendi' respondió: "Hablamos del central español más exitoso de la historia, tanto con el Real Madrid como con su selección. No sé qué ha respondido Xavi... Vamos a ser normalitos en esto del fútbol. Desde luego, el que ha hecho la pregunta...". Eso sí, no le garantiza la titularidad: "Un jugador de su calidad y de su categoría siempre va a ser un apoyo para el grupo, para sus compañeros y para mí como entrenador. Ayuda si juega, si no juega y está en el banquillo, si está lesionado desde fuera... Nos reímos un poco en los entrenamientos. Igual que cuando tuve el rifirrafe con Suso. Os pensáis que estaremos a hostia limpia, pero para nada. Soy bastante abierto y hablo con la mayoría de mis jugadores de cualquier cosa, de la vida, de lo que dice la prensa, de lo que pasa en los entrenamientos o en los partidos... No con todos, pero sí con bastantes".
Para finalizar, el míster del Sevilla no quiso 'mojarse' en la polémica con el entrenador del Getafe, José Bordalás, porque "están los árbitros para tratar eso, que son los que mandan", mientras que sí bromeó con el compañero de Mediaset Tito González ("venga, pregunta, que estoy caliente"), aunque fue otro quien realizó la clásica pregunta sobre la adaptación de los nuevos, en concreto Soumaré, al que comparó con Lukébakio y su fácil desembarco en Nervión: "Dodi es abierto. De los nuevos, quizás el que más. Siempre está alegre, sonriente, lo que hace que entres más fácil en un sitio nuevo. Igual algún día hay que echarle el freno, pero mejor así. A Boubakary le está costando un poco, pero qué se le va a hacer. No es con el idioma, sino con el fútbol. Con los minutos del otro día y los que pueda tener, si no va con su selección y se queda en el parón, seguro que avanzaremos. No viene para tres meses, sino para toda la temporada. Hay prisa por verle, pero, si sale él, echaríamos de menos a Sow".