Mientras Víctor Orta apura el mercado de fichajes para cerrar la llegada de un nuevo delantero, con Robert Bozenik del Boavista como principal candidato, uno de sus fichajes en esta ventana para el filial se presenta ya como una alternativa ilusionante para el ataque nervionense de cara a un futuro inmediato.
Se llama Mateo Mejía, aterrizó en Nervión tras desvincularse del Manchester United y desde que llegó ha llamado poderosamente la atención del staff técnico sevillista, ente ellos, por supuesto, Quique Sánchez Flores. Fichó en un principio para potenciar el Sevilla Atlético, pero con las vistas puestas en que pudiera dar el salto al primer equipo si el técnico lo estima conveniente.
Su etapa en Nervión no ha podido empezar de mejor manera, pues debutó a las órdenes de Jesús Galván poco después de anunciarse oficialmente su fichaje, ante el Cartagena, cita que terminó con 0-0, y, cuatro días después se estrenó como goleador en el amistoso contra el filial del Bayern, adelantándose con velocidad a la zaga germana para mandar el balón a la red.
Buenas sensaciones a las que dio continuidad en el partido del pasado domingo de Segunda RFEF contra el Antoniano, en el que anotó su primer tanto en encuentro oficial como sevillista. Así, anotó el segundo de los franjirrojos antes del descanso en un choque que terminó 3-0. Titular, evidenció su velocidad, técnica, pegada y que su adaptación ha sido inmediata.
Aunque su posición natural es la extremo por su rapidez, tal y como apuntaron a ESTADIO sus descubridores, también se desenvuelve en la punta de lanza como un delantero moderno, posición en la que lo utilizó Galván en el duelo contra el Antoniano y enamoró a todos los aficionados sevillistas que se desplazaron al Jesús Navas.
En este sentido, ESTADIO Deportivo ha podido constatar que en el club están encantados por el rendimiento inmediato del hispano-colombiano de solo 20 años y que, además, las veces que se ha ejercitado con el primer equipo, ha causando una gran impresión tanto en sus compañeros como en el propio Quique Sánchez Flores, que lo vigila muy de cerca como una posible alternativa para el ataque en el caso de que lo necesite.
No en vano, la intención de víctor Orta con este fichaje era ampliar el abanico de opciones en la vanguardia más allá de que cuente con ficha del filial y su lugar de momento sea el Sevilla Atlético. Lo cierto es que no tardado nada en llamar con mucha fuerza a la puerta del técnico sevillista.