Álvaro Palomo3 min lecturaLa goleada sufrida contra el Girona, acompañado de una pésima imagen, ha dejado completamente desolado al sevillismo y colocado al Sevilla en una situación crítica en la que cualquier buena noticia se recibe como agua de mayo y más si se trata de la recuperación de un futbolista que, hasta no hace mucho, se erigía en capital.
De esta forma, Marcos Acuña se ha reincorporado al resto del grupo y ha trabajado con total normalidad en la sesión de esta tarde en la ciudad deportiva nervionense tras el naufragio en Montilivi. Esto significa que el argentino ha acortado los plazos una vez que se estimó que se mantendría alejado de los terrenos de juego alrededor de tres semanas tras caer lesionado en vísperas del partido contra el Alavés, con problemas en el semimembranoso del muslo derecho que le impidieron reaparecer cuando ya había dejado atrás sus molestias anteriores.
Un contratiempo que le obligó a parar de nuevo tras haber encadenado varios lesiones que le han negado la continuidad en la presente campaña. De hecho, a principios de la temporada ya se perdió un mes de competición por problemas musculares, por lo que básicamente no ha podido alcanzar su mejor nivel, lo que supone un lastre para el equipo.
El futbolista, con una lección de compromiso, ha trabajado a destajo durante este periodo para reaparecer cuanto antes y ayudar al equipo, hasta el punto de que quiso sumarse a la disciplina del grupo la pasada semana, si bien no recibió el visto bueno de los servicios médicos. Sin embargo, este lunes se ha ejercitado a tope y se encuentra a disposición de Quique Sánchez Flores de cara al choque copero del próximo jueves en el Cívitas Metropolitano contra el Atlético de Madrid y al posterior liguero contra Osasuna. Las ganas del Huevo por regresar han sido vitales para recortar considerablemente los plazos y minimizar el problema del técnico en la izquierda tras la lesión de Kike Salas, dejando a Pedrosa como el único carrilero disponible.
Por ende, Quique contará con dos futbolistas más para la próxima convocatoria, pues, además del argentino, recupera a Soumaré, ausente ante el Girona por acumulación de amarillas. Sin embargo, continúa sin contar con los lesionados Lukebakio, que empieza a ver la luz al final del túnel, Gudelj, y Kike Salas, y En-Nesyri, con la selección de Marruecos en la Copa de África, en la que montó un lío tras el partido contra el Congo.