Fernando Mateos4 min lecturaCon las salidas de Óliver Torres, que todavía no se ha podido sumar al Rayados de Monterrey por la 'prohibición' del Sevilla FC, o Soumaré, de vuelta al Leicester City tras su cesión, Víctor Orta se mueve para reforzar un centro del campo donde tampoco se cuenta con Joan Jordán. En estos momentos, García Pimienta sólo tendría a Djibril Sow y el canterano Manu Bueno para arrancar la pretemporada, pues Hannibal hizo las maletas sin apenas jugar y Agoumé también han tenido que regresar al Inter de Milan, con el que tiene contrato hasta 2026.
En el caso del francés, en Nervión ya le han transmitido al club italiano su deseo de seguir contando con sus servicios, aunque no invertirán los 8 millones de euros pactados el pasado enero en una opción de compra "objetivamente poco realista" para la situación económica de los sevillistas, tal y como reconoció su director deportivo. "El Inter sabe nuestro interés de que continúe, pero la situación es complicada. Es difícil. El Inter y Agoumé saben lo que quiere el Sevilla, y Agoumé le ha dicho al Inter lo que quiere", añadió Orta.
La entidad de Eduardo Dato, por tanto, juega a su favor con el deseo del futbolista de regresar al Sánchez-Pizjuán, donde se ha sentido muy a gusto en la segunda mitad de la recién concluida campaña, en la que ha disputado 13 encuentros. Pero después de cuatro cesiones consecutivas, en Italia aseguran que el club 'nerazzurro' buscará un traspaso definitivo del futbolista, pudiendo rebajar sus pretensiones para escuchar ofertas a partir de 5 millones de euros.
El mediocentro galo, de 22 años, es muy valorado por los técnicos interistas, pero no tiene sitio en la plantilla que dirige Simone Inzaghi, más si cabe tras la llegada como agente libre de Zielinski, procedente del Nápoles. Por ello, la idea es hacer negocio con un futbolista por el que invirtieron en su día 4,5 kilos, anunciando la prensa italiana que la competencia comienza a crecer.
Así, uno de los interesados en rivalizar con el Sevilla por Agoumé sería el Udinese, sobre todo si acaba saliendo el serbio Samardzic, vigilado entre otros por la Juventus. Pero, además, también se apunta el nombre de un equipo de Champions como el Bolonia, que ha hecho historia al quedar quinto en la Serie A y jugará la máxima competición continental tras el triunfo del Atalanta, cuarto, en la Europa League.
La salida de Thiago Motta del banquillo del Renato Dall'Ara ha propiciado la llegada de Vincenzo Italiano, que ya tuvo al centrocampista francés a sus órdenes en la 20/21, cuando dirigía al Spezia, de ahí que haya sido de nuevo vinculado con el conjunto del norte de Italia. Pero no sólo en el país transalpino están pendientes del Agoumé, que mantiene un buen cartel en su país, donde brilló sobre todo con la camiseta del Brest, y también en Alemania, siendo varios los equipos de la Bundesliga que en el pasado llamaron a su puerta.