Fernando Mateos4 min lecturaEl grito fue unánime: “Junior, vete ya”. No se puede decir que fuese sólo un sector de la afición. El sevillismo explotó ante el Atlético de Madrid, antes incluso de que Barrios hiciese sangre con el 1-2 en la prolongación, y pidió en masa la salida de José María del Nido Carrasco como presidente del club. Antes del encuentro hubo una nueva protesta a las puertas del Sánchez-Pizjuán. Pero lo que se vivió durante el choque no es algo habitual, con la grada convertida en un clamor contra el máximo mandatario y, de paso, el director deportivo, Víctor Orta, al que también se le pidió voz en grito su "dimisión". Incluso, el colegiado tuvo que parar el encuentro durante unos minutos, algo que en realidad le hizo un flaco favor al equipo, que a partir de ese paréntesis comenzó a decaer. Las preocupaciones de la hinchada, no obstante, eran otras: todos contra quienes mandan.
Aunque se habla mucho de la Tercera Vía, con Antonio Lappi tomando posiciones y Fabrice Pastor aún pensándoselo, lo cierto es que 'Junior' está fuertemente agarrado al sillón. Su padre comienza a dar la batalla por perdida. Pero entre los accionistas de peso que sustentan el actual gobierno comienza a extenderse la opinión de que esta situación es insostenible. Los datos hablan por sí solos, como bien ha recogiendo la cuenta especializada @LaLigaenDirecto.
Desde que Del Nido Carrasco accedió al poder el 1 de enero de 2024, el Sevilla FC es uno de los peores equipos de LaLiga, con números propios de aquellos que pelean por huir del descenso. No en vano, es el tercero con más derrotas en este periodo de tiempo, con 21, las mismas que el desahuciado Valladolid. Sólo empeoran su registro un Getafe al alza, con 22, y la UD Las Palmas, con 27, once de ellos a los manos, precisamente, de Xavi García Pimienta, el técnico elegido el pasado verano para liderar el supuesto proyecto de reconstrucción.
Pero no queda ahí la cosa. Resulta evidente que la debacle viene de antes y así lo demuestra otro dato aportado por Fran Martínez, que pone de relieve que entre José Castro y 'Junior' han perdido 41 de los 100 últimos partidos en Primera división (50 con cada uno de ellos). Un elevado 41% que contrasta de forma alarmante con los 17 que se perdieron en los 100 anteriores (17%). Pero la cuesta abajo que se siente especialmente en el otrora fortín del Sánchez-Pizjuán, donde los blanquirrojos sólo han ganado 11 de sus últimos 37 choques en las dos últimas dos temporadas: un triste 29,73%.
Números y más números que dejan retratados a los cuales dirigentes. Pero también a su entrenador. No en vano, García Pimienta es ya el entrenador de la historia del Sevilla FC en la máxima categoría con peor porcentaje de victorias, con un 30%, después de haber dirigido al menos 30 encuentros, que son los que lleva sentado en su banquillo. En ellos, su pobre balance es de 9 victorias, 9 empates y 12 derrotas. No es de extrañar que su puesto penda de un hilo, pudiendo llegar la destitución si cae de nuevo el Viernes de Dolores ante el Valencia en Mestalla. Aunque la afición apunta más arriba.