El Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol ha hecho público este miércoles 3 de abril la sanción al Getafe después de que el pasado sábado se registrasen cánticos racistas contra el jugador del Sevilla FC, Marcos Acuña, y también sobre el entrenador, Quique Sánchez Flores. El castigo consiste en el cierre parcial del Coliseum durante un periodo de tres partidos además de una multa de 27.000 euros.
Según la propia RFEF, la sanción se aplica en base al artículo 51.7 del Código disciplinario de la RFEF por la comisión de infracciones muy graves tipificadas en los artículos 69.1.c), 69.2.d) y 76.2, apartados b) y d). Al lateral argentino Marcos Acuña le llamaron "mono" desde la grada y más tarde, fue Quique Sánchez Flores el que tuvo que recibir cánticos de "gitano".
Ahora será el Getafe el que debe identificar antes de las 16:00 horas de este miércoles la estructura de las gradas del campo para determinar la zona a cerrar que, según el acta arbitral, afectaría al sector situado en la zona central del campo detrás de la posición del árbitro asistente número dos: "A tal efecto, en los tres próximos encuentros a disputar por el Getafe en su campo se deberá cerrar el acceso al público en dicha zona, que quedará debidamente acotada, no pudiéndose reubicar a los espectadores que, en su caso, pudieran venir ocupando las mismas con carácter habitual", puede leerse en la resolución.
Asimismo, y durante el periodo de sanción, la zona clausurada deberá mostrar un mensaje o consigna "visible de condena a los actos y conductas violentas, racistas, xenófobas e intolerantes en el fútbol y apoyo al juego limpio".
El arbitró Javier Iglesias Villanueva reflejó en el acta del partido que en el minuto 68 tuvo que detener el encuentro debido a que se produjeron insultos racistas sobre el dorsal 19 del equipo visitante, con palabras como "Acuña mono" y "Acuña vienes del mono", desde aficionados situados en la zona central del campo detrás de la posición de mi árbitro asistente número dos.
Añadió también que dicha incidencia, siguiendo el protocolo de actuación en estos casos, fue anunciada por megafonía, no reanudando el juego hasta dicho momento dos minutos y medio después y no produciéndose en ninguna ocasión más en el encuentro.
Al término del mismo, Quique Sánchez Flores, que fue entrenador del Getafe, desveló en la conferencia de prensa que un sector de la grada del Coliseum le llamó "gitano" como insulto racista y despectivo y dijo que la actuación de esos aficionados fue "aberrante".