Ya a la vuelta de las mini vacaciones, el Sevilla no parecía el mismo. Sampaoli ha hecho hincapié, primero con dobles sesiones para ganar fondo físico y luego con un gran trabajo psicológico para que sus hombres recuperen la fe, en que será importante estar unidos y concienciarse de que vienen curvas. Como en '300', formar un frente común y férreo ayuda a reducir la sensación de que se han quedado muy pocos a defender el fuerte. Entre bajas forzadas y no forzadas, los servicios mínimos en Nervión deben dar para aguantar mientras llegan los refuerzos invernales. Con lo que pasó en verano, es lógico que muchos no confíen en la mano de Monchi, ésa que tanta gloria ha dado en blanquirrojo. Pero no queda otra: conjurarse y rezar.
Conjurarse para que los que se quedan saquen el fútbol que tienen, que tuvieron al menos. Ni son tan malos como hasta antes de interrumpirse LaLiga ni seguramente tan buenos como en los inicios de Lopetegui. El término medio debe valer. Con compromiso y las ideas claras, los nuevos conceptos inculcados por el míster argentino podrían solventar la papeleta de una campaña difícil a todas luces. En la Copa del Rey, mientras llegan rivales más complicados, ha cumplido sin alardes contra Velarde y Juventud Torremolinos, imponiendo la diferencia de categoría, calidad y pegada. Es lo que hay. No se trata de resignación, sino de pragmatismo.
DMITROVIC: 6
Acertado con los pies y atento en los balones colgados, salió bien para tapar ángulo a Machuca en la mejor llegada local del primer tiempo, repitiendo, incluso fuera de su área, cuando fue necesario evitar contras en largo.
NIANZOU: 6
Es frío como el hielo, aunque se recarga de confianza en cuanto atina varias veces seguidas en el pase. Buena anticipación y una superioridad por alto que debe rentabilizar más.
FERNANDO: 6
Incrustado entre los centrales, otorga mucha seguridad y oxigena la generación desde atrás. Será, al parecer, su cometido mientras se pone al cien por cien y llegan refuerzos invernales atrás. Se le echa de menos en el pivote, donde exhibió hasta hace nada grandes lecturas de partido, coberturas plenas de sacrificio y ruptura de líneas en conducción.
GUDELJ: 6
Inserto en su paradoja de esta campaña: algún que otro problema defensivo, de concentración o de precisión, pero lúcido cuando se incorporaba al ataque.
JESÚS NAVAS: 7
Incisivo, como de costumbre, por el carril derecho, desde donde probó los reflejos del portero del Torremolinos y colgó varios centros prometedores. Se la jugó al filo del descanso en un posible penalti a Javi López que sí pareció.
JOAN JORDÁN: 5
Un par de errores en la salida propiciaron contras locales, si bien se fue entonando con el paso de los minutos. Marcó en el alargue en una de sus pocas apariciones en área rival, que antes eran frecuentes.
RAKITIC: 5
Llevó el peso de los ataques blanquirrojos, soportando una fuerte presión, pero sin complicarse con pases horizontales o interiores con riesgo. Oficio para la contención.
REKIK: 5
Como siempre con este esquema, se ocupa más de contener que de atacar, siendo un poco asimétrico, por tanto, en ese perfil zurdo. Algunos errores en las entregas, parcialmente perjudicado por el fuerte viento. En general, expeditivo y ganador en los cruces.
ÓLIVER TORRES: 6
Menos activo que ante el Volendam, cuando hizo estragos como improvisado extremo derecho, ejerció esta vez por dentro, auxiliando al doble pivote en la generación. Se entendió bien con Navas.
RAFA MIR: 6
Sigue extrañando verlo acostado a una banda, porque tiene potencia y zancada, pero sufrirá en LaLiga con laterales más rápidos y pegajosos. Buena asistencia en el 0-1, aunque erró luego un par de veces en lo suyo, el remate. En otro centro suyo calcado, Dani Fernández la metió en su propia meta para sentenciar la contienda. Disparó con el tiempo cumplido para que Jordán aprovechase el rebote.
CARLOS ÁLVAREZ: 8
Es mediapunta, pero no se va a bajar de este tren, porque lo del 'falso 9', incómodo para otros (léase Suso), no le molesta un ápice. Aparece y desaparece, vuelve locos a los centrales con su movilidad y castiga en varias ubicaciones. Se ofrece siempre, no le tiembla el pulso y aguanta los golpes. Mientras no llegue uno mejor, ofrece exactamente lo que quiere Sampaoli de su 'referencia' arriba. Falló una muy clara de cabeza, pero no perdonó a la siguiente que tuvo.
NACHO QUINTANA: 7
Buenos minutos, de nuevo, del atacante, que provocó una falta peligrosa, se puso de gol un par de veces y percutió con la derecha en la acción que supuso el 0-3.
KIKE SALAS: s.c.
Salió con el tiempo casi cumplido y apenas tuvo que intervenir, ejerciendo además de carrilero zurdo.
JORGE SAMPAOLI: 6
No arriesgó nada: puso a los once mejores (diez del primer equipo, ya que no cuenta con Januzaj, y Carlos Álvarez), a sabiendas de que deberá hacer un mínimo de dos cambios en LaLiga por sanción. Quiso dar confianza a un equipo y a un dibujo (1-3-4-3) que ha afianzado durante los amistosos, con Fernando de coche escoba, Rafa Mir tirado a la izquierda y un 'falso 9'. Protagónico, pero ecléctico, vertical y de pensamiento rápido, con ejecución mayor si es posible.