Antonio José Medina4 min lecturaCuando "las cosas del fútbol" te ponen contra la pared y la necesidad aprieta, la exigencia pasa a un segundo plano. En esa situación se encuentra un Isco Alarcón que aguardó más de un mes para elegir destino tras salir del Sevilla FC y, cuando encontró un equipo con aspiraciones y futuro, una de las sensaciones de la Bundesliga y con el que podía pelear por la Champions, se frustró su fichaje. Y lo hizo el último día de mercado, cuando ya no tenía opción a encontrar una alternativa.
Ello lo condenaba a jugar en una liga de segunda fila (Turquía), pero tendría que decidirse -siempre que alguien lo quiera- antes del próximo jueves o a aceptar alguna de las ofertas que le han llegado de otros campeonatos de Asia (China y Emiratos Árabes) o América (la MLS norteamericana).
La otra opción es que un equipo con fichas libres y capacidad económica lo convenza, pero de esos quedan pocos y ya no podría elegir como sí lo hizo en el caso del Unión Berlín.
Según publicaba ayer The Times, ese equipo existe y está interesado en hacerse con Isco Alarcón. De hecho, está 'desesperado' y ha tocado todo lo que se ha movido en este mercado invernal. Y, además, es un histórico del fútbol británico. Pero que marcha penúltimo en la Premier League. Se trata del Everton.
El equipo de Liverpool, que acaba de despedir a Frank Lampard y el lunes anunció el fichaje de Sean Dyche como técnico hasta 2025, ha incorporado en los últimos días a Anthony Gordon, pero vio cómo el exvillarrealense Danjuma se le escapaba en el último momento o que jugadores, como Héctor Bellerín, rechazaban sus ofrecimientos.
Los últimos 'desplantes' han hecho que le quedan fichas sin cubrir y que pueda acceder al mercado de agentes libres. Y ahí, aunque hay poco donde elegir, queda algo. E Isco Alarcón es la joya de la corona.
Sean Dyche acaba de aterrizar y en breve decidirá qué es lo que le falta, pero es difícil decir 'no' a un jugador como Isco. El futbolista malagueño, por su parte, deseaba un club con el que pudiera seguir jugando competiciones europeas y el Everton, ahora mismo, no lo es, pero tampoco puede quedarse parado hasta junio o ir a una liga menor si lo que pretende es seguir en la elite. Un 'matrimonio de conveniencia' hasta final de temporada sería la solución perfecta para ambos. A Isco se le abre una puerta de equipo grande y, en su situación, tal vez sea la última de esta temporada.